jueves, 30 de septiembre de 2010

Apuntes



Punta fina negra sobre papel.
Retratos rápidos de antiguos alumnos del Colegio rey Juan Carlos I (El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos cotidianos

¡SÁLVAME!

Mi Dios, sálvame del “Sálvame”,
de su murga chabacana,
de su cutre contenido,
de tanto cantamañana,
y te prometo, Señor,
rezar todas las mañanas,
para sanar vista y mente
y para proteger mi alma,
de la chusma y de los chismes
del pestilente programa.

Mi Dios, líbrame del “Sálvame”,
de sus constantes falacias,
de sus ramplones enredos,
de sus muchas bufonadas,
carentes de amenidad,
y de mal gusto, sobradas,
y te prometo, Señor,
rezarte cada mañana,
para vivir protegido,
de los tufos del programa,
de sus lerdos contertulios,
reyes de las horteradas.

Mi Dios, sálvanos del “Sálvame”
y de parientes programas,
por sus foscos contenidos,
por el bien de la palabra,
del honor, de la belleza,
del buen gusto y de la gracia,
que en manos de estos tunantes,
se han vuelto grandes piltrafas.

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Dibujos de juventud



Témperas sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

CANSANCIO

¡Qué trabajito, Señor,
cuesta cambiar malos vientos,
cuando las mentes se pliegan
al conformismo funesto,
a aquel que, nubla razón,
nos vuelve manso borrego
de un provinciano rebaño,
tropilla de rango cero!

¡Qué trabajito, Señor,
cuesta desnudar a un santo,
cuando en los altares viven,
soberbios y mentecatos,
que creen, que las poltronas
son los eternos regalos
que el pueblos les concedió,
por ser listillos y guapos!

¡Qué trabajito, Señor,
cuesta cambiar las barajas,
cuando los truhanes juegan
con cartitas bien marcadas,
sobre tapetes de seda
y oscuridades macabras,
para llenar sus bolsillos
y dejarnos las migajas!

¡Qué trabajito, Señor,
ser honrado, en esta fiesta,
de mediocres convertidos
en reyezuelos de mierda,
donde el más lerdo de todos,
hace relojes de piedra,
para convencer al mundo,
de su pericia y destreza!

martes, 28 de septiembre de 2010

Melilla


Plumilla, tinta china sepia sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Reflexión marginal decimocuarta

EN TORNO A LA DESCAFEINADA HUELGA GENERAL DEL PRÓXIMO 29, O COMO GRITAR CON LA BOCA PEQUEÑA, O COMO “CANTÓ LA GALLINA”, O COMO LIAR EL LIADO LÍO DE LA CRISIS.

Hace algún tiempo que no publicamos, en éste, nuestro modesto blog, nuestras particulares reflexiones marginales. Ello, no es debido a que nos hayamos olvidado de reflexionar sobre los cercanos asuntos que nos duelen y nos hacen reos, a veces, de una supina incomprensión de los mismos. Ganas, motivos y temas han sobrado, en esta ausencia, para despacharse con holgura en estas marginalidades, en estos tiempos de desencanto, desorientación y desesperanza para nosotros y para muchos hermanos, amigos o desconocidos.

Unos señores, a su creer, poderosos mandamases de los sufridos, pacíficos y pacientes trabajadores, ante la penosa situación de precrisis (negada durante tiempo), crisis (con todos sus avíos) y postcrisis (de duración lejana y desconocida), convocan una HUELGA GENERAL para mañana, 29. Hasta aquí, aparentemente, todo dentro de la normalidad y de la legalidad. Pero, unos segundos después de la convocatoria, empieza el baile de lo rocambolesco, la danza de las contradicciones, las cabriolas de los chaqueteros, los chotis y pasodobles de los comprados, y aparecen, cosa lógica, en las mentes de los descarriados, de los súbditos, de los llamados “de a pie”, del populacho, de muchos de nosotros, los primeros síntomas de “no entender nada”.

Uno de los grandes “manitú” del sindicalismo (hay dos) manifiesta, sonrientes y sin pudor, que la huelga convocada es una auténtica putada (el mismo que, para alegrar a los muchos parados de nuestro país, realiza, en sus ratos libres, un magnífico crucero por el mar Báltico) y el otro (asiduo visitante de restaurantes de 5 tenedores), al tiempo, manda hacer unos vídeos chabacanos, con unos personajes impresentables, para instruirnos y darnos a conocer a los verdaderos causantes de la crisis y, de paso, nos señalan “contra quien van dirigidos sus palos”, olvidándose del gobierno de este país, lógica aplastante, ya que es el que los mantiene a todo plan en sus costosas poltronas.

Ante tanto cachondeo, ante tanto dije, digo y diego, ante tanta mutación, ante tanta desfachatez, los comparsas de esta farsa (nosotros), estamos algo (bastante) cabreados, liados, confundidos y desorientado.

Nos atrevemos, como puro ejercicio reflexivo, a realizar un catálogo del personal y de su hacer el día 29.

En primer lugar, los que irán a la huelga:
- para defender su “mamela” (Jefes, jefecillos, sindicalistas rasos y parientes muy afines, casi todos ellos, liberados)
- porque les gusta el “cachondeo”, el burraqueo, el alboroto, el pescar en río revuelto.
- por estar padeciendo un vergonzante paro y necesitar moverse para no quedarse eternamente anquilosados e inmóviles.
- por convencimiento de que la huelga es necesaria y justa (Una minoría).

En segundo lugar, los que no irán:
- por estar en total desacuerdo con los sindicatos y con el gobierno.
- por no perder, ante la dura crisis, parte de su pírrico sueldo.
- porque, tristes borregos, el señor ZP y su adlátere así se lo mandan.
- porque viven, desgraciadamente, en otro mundo, ajenos e ignorantes, faltos de todo, hermanos de la más brutal indigencia.

En tercer lugar, los dubitativos:
- numeroso grupo de españoles, atados a sus dudas, que les gustaría ir, pero, si fueran, estarían alineándose con los sindicatos, con los que no están de acuerdo y, si no van, perderían la oportunidad de decirle al gobierno que no están de acuerdo con su política, ni con su nefasto o nulo hacer para salir de la crisis.
los indecisos de siempre que, hasta última hora, no saben nunca lo que van a hacer.

Y, por último, nosotros, ¿Qué Haremos? En nuestra situación de jubilados, negarnos a ser comparsa, borrego, masa, de unos y de otros, de sindicatos, del gobierno, de los partidos políticos, de los medios de comunicación, de enfrentadas banderías. Dedicaremos el día a disfrutar de él, con nuestras gentes, con nuestras cosas, sin olvidar, los deseos de que no ocurran incidentes graves y deseando que, de una puñetera vez, aparezcan, tras el negro horizonte, algunas lucecitas de esperanza, en estos duros, desalentadores y aciagos tiempos de crisis.

Y después de la HUELGA GENERAL, las preguntas del millón: ¿Cambiará algo? ¿Cambiarán algunos? ¿Cambiarán los pasos de esta agónica España?

lunes, 27 de septiembre de 2010

Boceto


El "chatito" de vino.
Boli negro sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de tiempos de crisis

¡QUÉ VIENE, QUÉ VIENE!

¡Qué ya viene, qué se acerca!
¡Qué ya queda poco tiempo!
¡Qué la huelga viene loca,
atufando a poco serio!
Y los padres de la patria,
malandrines y sabuesos,
no saben como salir,
de este craso atolladero.
Y a los grandes sindicatos,
se les ha visto el plumero,
plumerito costeado
con dineros del gobierno.
Y… ¿A qué huelga han de ir,
los currantes de este pueblo,
si hace tiempo, están en huelga,
la gran mayoría de ellos?

Llegará el funesto día,
cargado de desencuentros,
de contradictorias cifras,
de historias y cuentos viejos,
y todos habrán ganado,
y nadie dejara su puesto,
que dimitir, es pecado
y, sin dudas, sacrilegio,
para la gente que medra,
en estos ríos revueltos.

¡Qué ya viene, que se acerca!
¡Qué ya queda poco tiempo!
¡Qué la huelga viene loca,
con aires de malos vientos!

domingo, 26 de septiembre de 2010

Poderoso caballero "Don Dinero"


Témpera sobre cartulina negra.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos íntimos

POETA DEL UNIVERSO

Leyendo junto a la mar,
éstos, mis preciados versos,
descubrí la pura esencia
de mis locos pensamientos,
y un no sé qué, clandestino,
hijo de mis grandes miedos,
deshojó llantos y flores,
que entre mis manos murieron.

Poeta, yo me sentí,
gran amo del universo,
muy capaz de descifrar
mil enigmas y misterios,
y en las almas, penetrar,
y conocer sus secretos,
y ver todo lo invisible,
y hacer real cualquier sueño,
y vivir entre los hombres,
vivo, después de haber muerto.
Poeta, con sutil alma
que domina al azul cielo,
y que se bebe sus días
en un laborar eterno,
y que oculta sus miserias,
y sus dolores ya viejos,
entre gloriosas palabras
paridas en recio pueblo.
Poeta visitador
de las aulas del infierno,
que pasa y que pisa altivo
los resbaladizos suelos,
sin temor a fragmentar
los más bruñidos espejos,
luces, donde se reflejan
las miserias de los cuerpos
y donde, con volar suave,
se salvaguardan los besos.
Poeta, ido navegante,
de los tejados de cieno,
de los palacios ruinosos
y de los pajares de hierro,
buscando sentir y amar
la vida, regio sustento.

Y al final de este camino,
indolencias y lamentos,
son los duros migajones,
fiero merecido premio,
por encerrar a la vida
en unos pocos de versos.

Leyendo junto a la mar,
éstos, mis preciados versos,
descubrí, que toda vida
encierra aromas de cuento,
que es efímera canción,
de notas de frágil sueño,
y que, como crecida ola,
lenta, se nos va muriendo,
hasta que... nuevos poetas
la llenan de versos nuevos.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Retratos



Punta fina negra sobre papel.
Retratos rápidos de antiguos alumnos del Colegio Rey Juan Carlos I (El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos íntimos

¡QUÉ VERGÜENZA, DIOS!

¡Qué vergüenza, que me guste,
a ratos, soñar despierto,
inventar miles historias,
volar, como vuela el viento,
acariciar con mis manos
las llagas del universo
y sorprender a la luna
con sus amores secretos!

¡Qué vergüenza, que desprecie,
en el hombre, su intelecto,
cuando babea maldades,
cuando despierta los miedos
y, endiosado, muere, mata,
de lo ajeno, se hace dueño,
y sus miserias esconde
en fosas de ricos muertos!

¡Qué vergüenza, que me guste
rezar unos “Padres Nuestros”,
oír cantos gregorianos,
hablar con Dios, en silencio,
celebrar la Navidad
como se hacía, hace tiempo,
con pandereta, zambomba y...
que no falte el Nacimiento!

¡Qué vergüenza, que no quiera
sermones de tiempos viejos,
oír hablar de castigos,
oír hablar del infierno,
escuchar necias palabras,
estandartes de los cleros,
pilares de fanatismos,
que los hombres padecemos!

¡Qué vergüenza, que me guste
contar historias y cuentos,
recordar ido pasado,
resucitar los recuerdos,
escribir vividas páginas
de mis vivos, de mis muertos
y despertar cada día,
entre sonrisas y versos!

¡Qué vergüenza, que desprecie
obras del arte moderno,
que mis ojos no comulguen
con tales experimentos,
retablos de maravillas
para bien vivir del cuento,
para ocultar la pobreza
de muchos grandes maestros!

¡Qué vergüenza, que me guste
pregonar lo que yo siento,
que tengo un alma sencilla,
que me agrada ser de pueblo,
que familiares y amigos
son mi mejor argumento,
y que río, canto, lloro
y amo, sin ningún complejo!

(Tomado del libro de poemas "365 y una poesías")

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Retrato


"La Prima" haciendo ganchillo.
Tinta china negra sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos a Gloria Fuerte

UNAS PREGUNTAS A GLORIA

¿Por qué te fuiste tan pronto,
si quedaban muchas risas,
por estrenar, por brotar,
en las bocas de las niñas,
en los rostros de los niños,
en los juegos de las ninfas?

¿Por qué guardaste tu pluma,
si quedaba mucha tinta,
para escribir nuevos cuentos,
infinitas poesías,
retahílas de palabras
y otras saladas cositas?

¿Por qué buscaste el silencio,
si quedaba algarabía,
ganas de pasarlo bien,
de leer tus poesías,
de tomar a broma y chanza,
las penurias de la vida?

¿Por qué apagaste tu voz,
si quedaban melodías,
por escuchar y cantar,
rebosantes de alegría,
por una tierna legión
de sana chiquillería?

¿Por qué rompiste tu alma?
¿Por qué apagaste tu vida?
¿Por qué…?

martes, 21 de septiembre de 2010

Caricaturas



Lápiz y punta fina negra sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

Y LOS ABUELOS A LA HUELGA

La cosa tiene mandanga,
mandanga de pan y huevo,
mandanga de gran tronío,
mandanga y ningún salero.
Un alto sindicalista,
señorón por estos predios,
liberado tragaldabas ,
algo cortito y fullero,
defensor, cuando se acuerda,
de los sufridos obreros,
tuvo una grandiosa idea,
los sesos se le fundieron,
propuso la grande gesta,
con la geta de hombre bueno,
con palabritas de santo:
¡A la huelga los abuelos!
Huelga contra los hijos,
contra las nueras y yernos
y, para darle grandeza,
contra los amados nietos,
dejándolos “tiraítos”,
por todito un día entero,
el tiempo que dura la huelga,
que han programado estos lerdos.

¡Qué poco saben de amores,
qué poco saben de abuelos,
qué poco saben del dicho:
“Lo primero es lo primero”.
Así, dejadnos tranquilos,
al ladito de los nietos,
buscad otra soldadesca,
para saciar vuestros egos,
de grandes sindicalistas,
de defensores del pueblo.

lunes, 20 de septiembre de 2010

Plumillas



Tinta china azul sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos alcoreños

DECORADOR IMPOSIBLE

A la orilla del alcor,
mirador sobre la vega,
voló mi imaginación,
en busca de vistas nuevas,
que despertaran mis ojos
de su caduca ceguera.
Decorador me sentí,
de aquella cercana tierra
y, con alocadas prisas,
cambié lo que había en ella:
Decoré el celeste cielo
con gaviotas marineras;
mil olas de blanca espuma
deslicé sobre la vega
y, sobre la mar, sembré
un oasis de palmeras.
Mis ojos se encandilaron
con la iniciada tarea,
y seguí yo, decorando
lo que encontré por mi vera.
Y decoré los caminos
con finos polvos de estrellas,
y en el aire coloqué
miles de puertas abiertas
para que salgan y entren
riadas de palabras nuevas.
Un vértigo placentero
se enredaba entre mis piernas,
mientras la loca locura
libaba en vieja colmena,
Y decoré las fachadas
con arabescos de seda
y al pueblo le coloqué
tejado de bellas tejas,
para que el agua de lluvia
se deslizara por ellas.
Una mirada perdida
se enamoró de la Muela,
y me ayudó a decorarla
con burbujas de acuarela,
con escarchas azuladas
y perlas de agüita fresca.

La locura fue creciendo,
como las mentiras ciegas,
nada quedó por cambiar,
nada escapó de la quema.
El sol, la luna, los vientos,
todos cumplieron condena.

Pasada gota de tiempo,
desperté, sin darme cuenta,
y todo volvía a ser,
igual, como hace un rato, era.

Nunca podré yo saber,
por muy sabio que me crea,
que es mejor para mi vista,
lo real o las quimeras,
aunque resulta bien grato,
perder algo la cabeza,
en inventar nuevos mundos
de efímeras existencias,
para pensar, que la vida
puede ser de otra manera.

(Tomado del libro de poemas "365 y una poesías")

sábado, 18 de septiembre de 2010

No somos lo que aparentamos


Caretas.
Témpera sobre cartulina negra.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡RENACE!

¿Dónde pacen los hermanos,
rebeldes, en otros tiempos,
cuando los hoy, necesitan,
insurrecciones y arrestos?

¿Dónde dejasteis la fuerza,
la razón y el descontento,
el pan del inconformismo
y vuestros sagrados credos?

¿Dónde perdisteis la voz,
la palabra, el argumento,
para defender lo justo,
más allá de mismo cielo?

¿Dónde guardáis la verdad,
la ventura y los recuerdos,
que ya para nada os sirven,
en estos precarios tiempos?

¿Dónde, hermano, hoy te escondes?
¿Por qué guardas tú, silencio,
sabiendo que la cobardía,
es el estigma del muerto,
del nefasto pesimismo
y de los sombríos miedos?

Despliega, hermano, tu voz,
a la rosa de los vientos,
que el mundo te necesita,
para hacer un mundo nuevo,
y lleva tu rebeldía,
como lábaro sereno,
capaz de amansar las aguas
de los más fieros veneros,
y conducirlas, salubres,
para alivio del sediento,
ansioso de horas felices,
ávido de nuevos tiempos.

viernes, 17 de septiembre de 2010

Boceto


Boli negro sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de final de verano

SEPTIEMBRE

Septiembre tañe campanas
de fresquitos y calores,
de romerías festivas,
de anunciada vuelta al cole,
de inicio de nuevo curso,
de agotadas vacaciones,
de mil sueños incumplidos,
de vividas emociones,
de celebrados encuentros,
de amargas separaciones,
de una luenga retahíla
de tilines y tolones
que, suenan en los oídos,
a sones de viejos bronces.
Septiembre tañe campanas,
campanas de tiempo y de hombre.

jueves, 16 de septiembre de 2010

Apuntes



Punta fina negra sobre papel.
Retratos rápidos de alumnos del Colegio Rey Juan Carlos I (El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Romancero de los Alcores

CARTA QUINTA Y ÚLTIMA

DE UN MODESTO POETA A SANTA MARÍA DEL ALCOR

“El Viso, loco se ha vuelto,
locas llegan las mañanas,

una locura, bien loca,
recorre calles y plazas,
se cuela por los zaguanes,
penetra en todas las casas,
El Viso es un manicomio,
¡Bendita locura santa!

El pueblo, loco de atar,
sueña en fecha muy cercana,
por verte, loco de amor,
a ti, Virgen, coronada.
Locos caminan los aires,
la Luna, en las madrugadas,
miles de alocados rayos,
el Sol, con celo, prepara,
para encender los Alcores,
para iluminar las almas,
para anegar de locura
viejas y nuevas Barriadas.
El Viso es un manicomio,
¡Bendita locura santa!

El Viso loco se ha vuelto,
locas tañen sus campanas,
las calles, senderos santos,
como locas se engalanan,
los visueños han tirado
sus casas por las ventanas,
por verte, locos de amor,
a ti, Madre, coronada.

Y yo, modesto poeta,
amante de la palabra,
en mi loco desvarío,
os escribo breve carta,
sumándome a la locura
que en mi rededor cabalga.

“Harto difícil resulta,
encontrar justa palabras,
cuando el hombre se dirige
a la más egregia Dama,
Señora de los Alcores,
Virgen y Madre adorada.
Mas, los vientos del amor,
abren cerradas ventanas,
y los aires de la Vega
inventan nuevas mañanas,
donde los oscuros miedos,
galanes de horas ingratas,
se marchan despavoridos,
dando paso a la esperanza
y a la fugaz osadía,
puertas de la dicha humana.

Alcora, Reina del Cielo,
Madre nuestra, Inmaculada,
aunque falta no te hiciera,
leed despacio mi carta,
descubrid, poquito a poco,
las flaquezas de mi alma
y, sí por bien lo tuvierais,
ayudadme a superarlas,
y como don inmerecido,
colmadme de vuestra gracia,
para así, saborear,
con apetecida calma,
los aromas, los efluvios
que de tu corazón, manan.

Sé, que una y miles de veces,
fuisteis, Madre, coronada,
pero nunca en los Alcores,
tierra de verdad mariana,
recibisteis el honor
de ser su mayor Luminaria,
el más hermoso Lucero,
la Mujer mas venerada
y, por si ello poco fuera,
ahora, Reina Coronada,
de este bendito Alcor,
para ti, eterna morada.

Antes de finalizar
ésta, mi sincera carta,
quisiera, en mi alba locura,
pan de condición humana,
dedicarte, Alcora mía,
una sencilla plegaria,
invocación retejida
con retazos de vieja alma,
posos de honda gratitud,
que en mis adentros, reclaman
amor, justicia, verdad,
bondad y firme esperanza:

“Alcora, Reina del Cielo,
Madre y Virgen Coronada,
socorred, sin dilación,
al olvidado que clama,
al manso desheredado,
a los borrados del mapa,
a los pobres marginados,
a la infancia maltratada
e interceded por nosotros,
pobres almas, descarriadas,
ante el Hijo que acunáis
entre vuestras manos santas”.

Vayan mis felicitaciones,
vuelos de palomas blancas,
pétalos de blancos nardos,
rezos de diáfanas almas,
suspiros de alba romera,
risas de alegres mañanas,
brisas de sueños romeros,
cantos de amor y esperanza,
vayan para ti, mi Reina,
dulce Alcora Coronada,
la osadía de mis versos,
la audacia de mis palabras,
mis secretos sentimientos
y mis más sinceras lágrimas,
gotas de hermoso rocío,
por ti, Virgen, derramadas,
para regar los silencios
que en mi corazón, guardaba”.


El Viso del Alcor
10 de Septiembre de 2005.
(Lugar, día, mes y año de la Coronación de Santa María del Alcor)

miércoles, 15 de septiembre de 2010

Maternidad


Lápiz sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Romancero de los Alcores

CARTA CUARTA

DE UNA ROMERA A SANTA MARÍA DEL ALCOR

A la vuelta del camino,
triste la Ermita se queda,
los romeros rezan bajo,
llorosa, va la romera,
va derramando suspiros
y lágrimas, finas perlas,
que dejan en sus mejillas,
divinas resbaladeras,
regueros de salinas aguas,
gráciles húmedas huellas,
son hilos de sentimientos
regados con agua fresca,
que rebosan de los ojos,
vasitos de alba pureza,
cuando el bello Simpecado
a su morada regresa.

La romera, ya en su casa,
sigue rumiando su pena,
le quedan algunas lágrimas,
pan de su enorme tristeza,
¡Qué un año es hora muy larga,
cuando se anda a la espera,
de un nuevo y ansiado encuentro
con la Señora alcoreña,
del Alcor, Santa María,
Reina, Virgen, Alcaldesa,
Alcora, para los visueños,
títulos que muy bien lleva!

La romera se ha dormido,
descansa, por fin, serena.
Los sueños, ajenos a todo,
han entrado en su cabeza,
razonan y disparatan,
a cierto y mentira, juegan.
De entre todos ellos, uno,
con machacona insistencia,
desaloja a los demás,
sólo, en su soñar, se queda.
El sueño es invitación,
insistente cantinela,
a escribir hermosa carta,
misiva para una Estrella
que, antes de pasar un año,
truene, haga calor o llueva,
habrá de ser coronada
en una espléndida fiesta,
como Virgen del Alcor,
de los alcores, la Reina.

El día se ha levantado
con ostensible pereza,
la romera se levanta
diligente y, con presteza,
su mano va desgranando
carta de una fiel romera,
a su querida Patrona,
Flor de suma pureza,
del Alcor, Santa María,
de los romeros, su Estrella.

“Soñada querida Madre,
Refugio de mi pobre alma,
Santuario de mis penas,
Ermita de mis esperanzas,
un sueño, hijo de la noche,
cromo de la madrugada,
me instó, presta, a dirigirte
ésta, muy sincera carta,
nacida en cuna sencilla,
entre suspiros, criada,
suspiros de grande amor,
amor de alma enamorada.

No sé sí algo cambiará,
en ti, Madre idolatrada,
sí mejor serás, Alcora,
cuando seas coronada,
si tú, Virgen del Alcor,
corona necesitaras,
para ser Reina del Cielo,
Lucero de la mañana,
la mejor de las Romeras,
la Imagen más veneradas,
en este predio alcoreño
de gran devoción mariana.

No sé, ni quiero saber,
de fiestas y zarandajas,
vivir y morir, yo quiero,
mirando tu bella cara,
reflejándome en tus ojos
como el sol en la mar clara,
y dibujar mil estrellas,
amorosas luminarias,
reflejos de tu bondad,
en el orillar de mi alma
y estar siempre a tu verita,
y rozar tu piel de nácar,
extasiarme en tu regazo
en una eterna mañana,
besar a tu lindo Niño,
cantarle una hermosa nana,
y a ti, Virgen del Alcor,
hablarte por sevillanas,
callandito y muy quedo,
para no romper la magia
de unas populares coplas,
de una voz enamorada.

No sé, Pastora Divina,
Aurora de la mañana,
si los fastos de los hombres,
a tu corazón, agradan,
sí los grandes despilfarros,
en horas de crudas lágrimas
y consentidas miserias,
en vuestro sentir, encajan.
No sé, Reina del Alcor,
pronto, Virgen Coronada,
dónde El Viso, amado pueblo,
dirigirá sus miradas,
sí, hacia el fácil celebrar,
sí, hacia tu doliente cara,
reflejo de las tragedias,
que a diario, las mañanas
anuncian con recia voz,
con ligereza, proclaman,
sin que éste, nuestro mundo,
se mueva por evitarlas.

Perdónanos, Gran Señora,
perdónanos, Madre Santa,
romera del Alcor soy,
romera soy por la gracia
que un día me concediste
cuando tu cara miraba.
¡Bendita sean, mil veces,
la hora y la feliz mirada,
en que me hiciste romera,
tú, mi Alcora Coronada".

(12.7.2005)

martes, 14 de septiembre de 2010

Recuerdos



Punta fina negra sobre papel.
Portadas del Periódico escolar "Burbujas" (Colegio Rey Juan Carlos I, El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Romancero de los Alcores

CARTA TERCIA

DE UN ROMERO A SANTA MARÍA DEL ALCOR

Las palabras de un romero,
mudas en sus pensamientos,
por una bella corona,
despertaron de sus sueños,
y en palomas mensajeras,
al verla, se convirtieron.

Al ver a su dulce Virgen,
Alcora, Reina del cielo,
se espantaron los prejuicios,
se dispersaron los miedos,
y una hermosísima carta,
impresa en papel de estreno,
se echó a volar por la Vega
con alto y sublime vuelo,
obra de una recia mano,
mano de un noble romero.

Carta de amor infinito,
álbum de ricos recuerdos,
magnífica sinfonía,
poema de altivos versos,
dedicada a su Patrona,
la Virgen de los visueños,
del Alcor, Santa María
y Madre de los romeros.

La carta, paloma blanca,
vino volando del cielo,
voló sobre los tejados,
se posó sobre el albero,
repitió su contenido,
con hacer de tenaz eco,
para alcanzar corazones
de los hermanos romeros.

“Que los sabios me protejan,
que me perdonen los cuerdos,
que me iluminen las musas,
por ser visueño y romero.

Quiero escribirte una carta
Madre de todos los Cielos,
quiero robarte, poeta,
todos tus mejores versos,
para componer poema,
que a ti, Virgen de mis sueños,
te sepa a preciado rezo,
a plegaria celestial,
a respetuoso requiebro.

Quiero escribirte una carta,
Alcora, Reina del Cielo,
para que El Viso se entere
de lo mucho que te quiero,
para que todo este Alcor
se sienta, como yo, romero,
romero de una Romera,
Romera de los visueños.

Quiero escribirte una carta,
Virgen de los alcoreños,
con las lágrimas que guardo
en un frasquito muy viejo,
con la pluma de un palomo,
al que cuento mis secretos,
arcanos de enamorado,
suspiros de fiel romero,
que dan sentido a mi vida
y elevan mis sentimientos
a cotas de gran altura,
desde la tierra a los cielos.

Quiero escribirte una carta,
Patrona de los visueños,
antes de ser coronada
Reina de El Viso, mi pueblo,
para que sepan mis gentes
y los muchos forasteros,
que ya fuiste coronada,
al principio de los tiempos,
cuando fuiste distinguida
como la Madre del Verbo,
Niño que llevas en brazos,
en estos gratos momentos,
y que, por todos nosotros,
murió en un viejo madero.

Gloria a ti, Santa María,
mi carta, fue sólo sueño,
mi alma y yo sólo aprendimos
a ser humildes romeros,
a acompañarte, mi Reina,
a la ermita de tus sueños,
para rezarte bajito,
para donarte mil besos,
para gritarte llorando,
¡Alcora, cuánto te quiero!

(12.5.2005)

lunes, 13 de septiembre de 2010

Boceto


Cristo.
Lápiz carbón sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Romancero de los Alcores

CARTA SEGUNDA

DE JESÚS NIÑO A LOS ARTESANOS QUE REALIZARÁN LA CORONA PARA SU SANTA MADRE

Jesús, celestial Criatura,
Rey de la Tierra y del Cielo,
Hijo de Santa María,
Niño alegre, Infante tierno,
acunado en el regazo
del más ínclito Lucero,
recibe la buena nueva
que, un esperanzado viento,
eco de sentir lejano,
prestigioso mensajero,
con silbos de inmediatez,
va gozoso repartiendo,
buena nueva, de hora santa,
de sueño de todo un pueblo,
de Coronación Canónica,
de hondo reconocimiento
a una Mujer, Madre y Virgen,
Alcora de los visueños.

El Niño de Santa María,
cromo de niño alcoreño,
carita de querubín,
ojitos bellos, despiertos,
ha tomado un viejo lápiz
y un papel, no menos viejo,
que, en sus sagradas manitas,
objetos bellos, se han vuelto.
Quiere escribir breve carta,
sin andarse con rodeos,
a los orfebres humanos,
llena de buenos consejos,
para que forjen corona
capaz de quitar el sueño,
de despertar en los hombres
los mejores sentimientos,
hacia su querida Madre,
Patrona de los visueños.

“Orfebres de manos hábiles,
orífices de santas manos,
ingeniad mil filigranas,
cuerpo de sueño dorado,
para una hermosa corona,
para una Virgen de nardo,
Señora de los Alcores,
Madre de egregios encantos.

Orfebres de manos hábiles,
orífices de santas manos,
fundid espigas doradas
en las fraguas de un buen santo,
para que el oro fundido
gane en destellos dorados,
labrad la nueva corona,
con ternura y bien despacio,
con mimo, con devoción,
con arte de enamorado,
poniéndole corazón,
dejando volar las manos,
en vuelos de fantasía,
al son de unos bellos cantos.

Orfebres de manos hábiles,
orífices de santas manos,
buscad honda inspiración
entre lo sacro y lo humano,
para hacer realidad,
trozo de arte, imaginado,
y de la nada, traerlo
a la verdad de un espacio,
para que los ojos vean
y que lo toquen, las manos.
Ojos y manos testigos
de vuestro honroso trabajo,
para una Madre que quiero,
con un amor sobrehumano.

Orfebres de manos hábiles,
orífices de santas manos,
no dediquéis mucho tiempo,
no gastéis vuestro trabajo,
en hacerme una corona
lujosa, de gran boato,
que no son cosas de niños,
ni soy el homenajeado.
Dedicad vuestro saber
y el arte de vuestras manos,
a la de mi amada Madre,
que sabrá recompensaros.
Y nunca olvidéis la historia,
de Aquel que fue coronado
con vil corona de espinas,
por muchos de sus hermanos.

Y en éxtasis merecido,
sí hacéis bien vuestro trabajo,
la Reina de los Alcores,
no tendrá ningún reparo
en guardaros, para siempre,
un lugar privilegiado,
allá, donde son eternos,
el arte y los artesanos.

Os deseo mucho éxito,
en vuestro noble trabajo,
y cuando llegue Septiembre,
mes con ansias, esperado,
en los ojos de mis gentes,
sabré sí habéis acertado.

Saludos de mi Santa Madre y
del Niño que está en sus brazos,
Recibid mil bendiciones,
gracias por vuestros regalos.

(12.1.2005)

domingo, 12 de septiembre de 2010

Retrato


Boli rojo sobre papel.
Retrato rápido de la abuela Rosario (Señora de D. Juan Manuel león Ríos, Alcalde visueño)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Romancero de los Alcores

CARTAS de, y a
SANTA MARÍA DE ALCOR

De la nada han nacido estos anónimos VERSOS que, agrupados en seis anónimas CARTAS, anónimas han de vivir, porque su autor así lo quiere.

Son CARTAS que, amando la libertad, no entienden de publicaciones, de libros, de editoriales, de gloria, de fama, ni de otras zarandajas literarias.

Buscadle, si os parece bien, un modesto rincón en vuestros corazones. Leedlas despacio y que, en este mundo de sobrados egocentrismos, su lectura os sirva para desprenderos del EGO, de las VANIDADES, del ENGREIMIENTO y de otros muchos cotidianos “adornos”, inservibles ropajes del estúpido género humano.

CARTA PRIMA

DE SANTA MARÍA DEL ALCOR A LOS VISUEÑOS

En mis cuerdos desvaríos,
buscando sonoros versos,
entre mis sueños, hallé,
carta, venida de cielo.
Reconocí yo, su origen,
por su sacro matasellos,
inmaculada paloma,
mensajera de altos vuelos,
colombina coronada,
áurea de albos destellos.
La misiva, en mis manos,
despertó tibios recelos,
temores de pecador
se agruparon en mi pecho.
La dicha y la desazón,
en mi corazón urdieron
latidos de ritmos locos,
en inaudito momento.
Mis temblores se hermanaron,
como la vida y los sueños,
y lágrimas de cristal
que, entre mis miedos nacieron,
cubrieron cansados ojos,
con unos salinos velos,
que me impedían leer
aquel bello parlamento.
Una letra firme y clara,
con trazos de amor eterno.
Un papel, leve soporte,
reciclado por los vientos,
blanco de pureza y cal,
con ribetes de azul cielo,
flotaba con levedad
sobre mis frágiles dedos.
Sequé mis húmedos ojos,
con la mente fui leyendo.
Cada palabra leída,
como las aguas, los fuegos,
como los aires, las nubes,
se expandía por los cielos
de éste, mi querido Alcor,
buscando oídos despiertos,
queriendo entrar en las almas
de los fieles alcoreños.

Altavoces de ecos dulces
lanzan a los cuatro vientos,
esencia de aquella carta,
encontrada entre mis sueños.

“Hoy, día para soñar,
con ojos y almas despiertos,
misiva de humilde Madre
dirijo yo a los visueños,
para que sepan, por siempre,
que en mi corazón los llevo,
que son granitos de sal
aquí, en los mares del cielo,
y, a la par, granos de azúcar,
que endulzan el firmamento,
premio de los bien nacidos
a orillas de un alcor viejo.
La gratitud heredada
del Hijo que llevé dentro,
sangre y carne de mi vientre,
de mi gran amor, su dueño,
me invita a manifestar
mi grande agradecimiento
a todos los moradores
de aqueste singular pueblo,
nacido sobre un alcor,
para estar cerca del cielo,
por haberme regalado,
entre canciones y rezos,
honor y bendita gloria
de ser, de todos, consuelo,
Patrona y Madre escogida,
Alcora, entre los visueños.

El vuelo breve de un año,
con impaciencia, yo espero,
para verme coronada,
Reina de los alcoreños.
Cuando las campanas canten
feliz acontecimiento,
las lágrimas derramadas,
los rezos de amor eterno,
los vítores y canciones,
me sabrán a dulces besos,
y en vuestra grata presencia,
yo diré a los cuatro vientos,
que aquí, me llamáis Alcora,
nombre que suena a requiebro,
que aquí, con gloria, me hicisteis
Patrona de los visueños,
que aquí, seré coronada
Virgen de los alcoreños.

Gracias sean derramadas
y sabed, que mucho os quiero.

María
(Por siempre, para vosotros, Alcora)”

(12.9.2004)

sábado, 11 de septiembre de 2010

Boceto


Borrico con todos sus avíos.
lápiz sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos alcoreños

¡ALCORA DE LOS ALCORES!

¡Alcora de los alcores!
Susurran los mansos vientos,
aquellos, que por septiembre,
bajan del celeste cielo,
para celebrar gozosos,
el mágico anual encuentro
de una Reina coronada
con sus hijos alcoreños.

¡Alcora de los alcores!
Tañen los bronces añejos,
de la torre de la Iglesia,
de la ermita, del Convento,
para anunciar el gran día,
el grande acontecimiento,
de tu salida gloriosa,
por las calles de tu pueblo,
convertido, en buenas horas,
en rinconcito del cielo.

¡Alcora de los alcores!
Silva el viejo cohetero,
al lanzar a las alturas,
palmeras de luz y trueno,
luminarias encendidas,
efímeros pregoneros,
que anuncian la buena nueva,
a los alcores visueños,
que tú, egregia Patrona,
ya caminas a su encuentro.

¡Alcora de los alcores!
Para ti, mis pobres versos.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Boceto


Bolígrafo azul sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

Mis rebeldías nacieron
envueltas en polvo y paja,
polvo de tiempo sumiso,
paja de rebelde causa.
Tarde llegaron al mundo,
a los campos de batalla,
en un ayer, desangrado,
falto de fe y esperanza,
Vinieron para denunciar,
a una fétida ignorancia,
que campea por doquier,
que se pasea a sus anchas,
por la tierra, por los mares,
por los todos, por la nada,
por estrechas callejuelas,
por avenidas y plazas,
tratando de subyugar
a toda la especie humana,
para hacer del pobre hombre,
sujeto de lerda masa,
que se deje manejar,
perdido en la extensa holganza.

jueves, 9 de septiembre de 2010

De la morería



Retratos rápidos a témpera sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡NUNCA LLEGARÁ!

Llegará, seguro, el día,
que las ranas tengan pelos,
que los olmos nos den peras
y que vuelen los jumentos,
mas, nunca jamás, llegará,
escritos guardan los cielos,
que el necio se vuelva sabio,
que se cure el majadero,
que sanen los mentecatos,
los estúpidos, los lerdos,
los imbéciles, los simples,
los sandios, gansos y memos,
o que, los pobres humanos,
lleguen a ser perfectos,
como el Dios que nos creó,
en los albores del tiempo.

Llegará, seguro, el día,
que las ranas tengan pelos,
que los olmos nos den peras
y que vuelen los jumentos,
mas, nunca jamás, llegará,
que, de la muerte, escapemos,
que la risa sea mala,
que no existan mensajeros,
que el amor desaparezca,
que se esfumen los misterios,
que se evapore el saber,
que se agoten los silencios,
o que los pobres humanos,
hagan de la tierra, cielo,
donde felices vivir,
hasta el final de los tiempos.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Apunte


Lápiz sobre papel.
Retrato rápido de antiguos alumnos Colegio Rey Juan Carlos I (El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡MALDIGO LA PALABRA!

Hoy, maldigo la palabra
que, conformista y silente,
se pasea por doquier,
patinada de estrecheces,
nacida en moderna hora,
criada en pobre pesebre,
donde el hablar es carencia
e infamia, en las flacas mentes.

martes, 7 de septiembre de 2010

Plumilla


Tinta china sepia sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡NO LEAS POESÍAS!

Si no sabes lo que quieres,
si la lectura es tormento,
si el pasotismo te puede,
si te tragas tus lamentos,
si la cultura te asusta,
si piensas vivir del cuento,
olvida la poesía,
reniega del loco verso,
apártate del poeta,
de sus palabras y sueños,
de su mente retorcida,
de su inútil parlamento,
y sigue en tu bello mundo,
de patanes y jumentos,
de flojos, a reventar,
de humano, venido a menos.

Y no tomes en tus manos,
libros de rimados versos
que, en el mejor de los casos,
actúan como venenos,
de los que matan y curan
a los sabios y a los necios,
y no se te ocurra leer,
ni el párrafo más pequeño,
no vaya a ser que recibas
la bendición de los cielos,
de aficionarte a escribir,
poemas de bellos versos.

Que Dios te tenga en su gloria,
yo, seguiré en el infierno,
con mi traje de juglar
y el rico entretenimiento
de inventar miles poemas,
de crear un mundo nuevo.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Plumilla


Tinta china sepia sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡RENIEGO!

A la una, en buenísima hora,
a la prima, de este cuento,
renegaré de los hombres,
de sus obras, de sus hechos,
de sus ínfulas baratas,
de sus frecuentes desprecios,
de sus cantos de sirena,
de sus asuntos infectos,
de sus malas intenciones,
de sus endiosados vuelos,
de sus flagrantes olvidos,
de sus falsos juramentos
y de todo lo que lleve,
estigmas de hombre hueco,
sentado en dorado trono
o amo de un estercolero.

viernes, 3 de septiembre de 2010

Apunte


Lápiz sobre papel.
Retrato rápido de antiguo alumno Colegio Rey Juan Carlos I (El Viso del Alcor)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡YA ES HORA!

Ya es llegada la gran hora,
de levantar liebres falsas,
de decirle pan, al pan,
de acabar con tanta guasa.

Ya no existe vuelta atrás,
ni el dejar para mañana,
hay que acabar de una vez,
con todas las bufonadas,
las del inepto político,
las de los hombres de paja,
las de la Belén Esteban,
las de su cuadrilla santa,
las de las grandes cadenas,
las de los que mucho mandan,
las de la niña bombón,
las de los artistas fachas,
las de los necios sabiondos,
las de los finos mandangas,
las de los ricos podridos,
las de los que mucho tragan,
las de los “guays” del momento,
las de los que venden armas,
las de los curas infectos,
las de las sectas sagradas,
las de los grandes famosos,
las del niñato y niñata,
y una interminable lista
de sonoras payasadas,
que nos colocan a todos,
al filo de la navaja,
de ser endiosado mono,
o mono, de rompe y rasga.

jueves, 2 de septiembre de 2010

Acuarela inacabada


Acuarela sobre papel. Trabajo de clase E.S.B.A. (Sevilla)
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¡MELILLA, LA QUE TANTO QUIERO!

Tus lamentos son los míos,
aunque la mar nos separe,
que las distancias se acortan,
entre amados orillares,
mi dolor es cosa mía,
mi dolor es trashumante,
y tú, me dueles, Melilla,
con dolor de pena grande,
cuando el desprecio te viste
con telas de hilos cobardes,
urdidas en las urdimbres
de los más hoscos telares.

A aquel que nunca te quiso,
no le pidas que te ame,
a aquel que no te conoce,
déjalo que hable en balde,
que suenan sólo a baldeos,
sus palabras de desaires,
escucha tú, al pródigo hijo,
aunque muy lejano, se halle,
que sus razones, bendicen,
tu tierra, tu mar , tus aires,
tu existencia milenaria,
tus cicatrices de madre.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Plumilla


Tinta china sepia sobre papel.
(Clickear para ver en mayor tamaño)

Versos de rebeldía

¿Quién podrá negarnos que nos alistemos voluntarios y conscientes a la denostada rebelión de la palabra y de los sentimientos?
¿Quién nos negará el derecho a la rebeldía, cuando los ejércitos de la mediocridad no dejan de parir mediocres y mediocridades?
¿Quién osará recluirnos en el manicomio de los cuerdos?
¿Quién?

Tomamos la palabra.
La tomamos a nuestro antojo y hacemos con ella lo que nos place.
La tomamos, la amamos y la odiamos, la quebramos y la inventamos, la gritamos y la susurramos y muchos más la… y la…
Jugamos con ella, le hacemos trampas, la veneramos y la olvidamos,
Pensamos con y en ella. En los sueños, morimos sin ella y, al despertar, vivimos por ella,
La sentimos, la padecemos, la disfrutamos, la extrañamos y, en ocasiones, la matamos, para, después, emulando a Dios, resucitarla y gozarla.


Lo que encuentres, a partir de este instante, durante unos pocos días, es desobediencia, insumisión, sedición, indisciplina, insubordinación, insurrección, indocilidad y, sobre todo, tardía e inútil rebeldía de unos hombres, ya mayores, hastiados de ser borregos.


¡PORQUE QUIERO!

Soy dueño de mi palabra,
de mis rimas y mis versos,
y a esta altura de la vida,
tengo perdido el respeto,
al crítico petulante,
al lector insatisfecho,
a los “progres” y entendidos,
al fracaso y a los miedos,
y no me importa gritar,
soy poeta, porque quiero,
poeta de la osadía,
de los utópicos sueños,
de verdades, de mentiras
de los tornadizos vientos,
de las fontanas heridas
y del hondo sentimiento.

Soy dueño de mi palabra,
de mis rimas y mis versos,
y los planto, complacido,
en las tierras de mi huerto,
en los mares de mis días,
en el orillar del cielo,
sin importarme la gloria,
sin esperar ningún premio,
efímeras criaturitas,
en este mundo de ciegos,
de empalagosos vecinos,
de zarrapastrosos necios,
de falsos intelectuales,
de patanes y mostrencos.

Soy dueño de mi palabra,
de mis rimas y mis versos,
soy vate, bardo, juglar,
soy poeta, porque quiero,
y si alguno no lo admite,
que se vaya a los infiernos,
donde, con seguridad,
allí, pronto, nos veremos.