lunes, 30 de enero de 2012

Una plumilla y cuatro detalles






Plaza Virgen de los Reyes (Sevilla)
Tinta china sepia sobre papel.
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Versos contra la basura doméstica

LOS BASUREROS DEL HOY

En esto tiempos que corren,
con alas de “todo vale”,
las basuras, en las casas,
viven como “marajaes”,
sus pestilentes aromas,
sus hediondos modales,
penetran en nuestras mentes,
con pasos subliminales,
a través de las rendijas,
de modernos ventanales,
planicies y plasmas del hoy,
estercoleros banales.

Las narices del humano
y las mentes razonables,
se han dormido, complacidas,
en tediosos arrabales,
empadronados en casa,
como vecinos notables,
donde la basura fluye
a mansalva, a raudales,
campeando a sus anchas,
con estigmas de imparable,
pandemia de tristes días,
maná de un mundo ignorante.

Encefalograma plano,
no hay que perderse detalle,
los “chismes” y las patrañas,
los cantos más miserables,
crímenes y violaciones,
el “famoseo” de clase,
los insultos, las querellas,
los insípidos debates,
viven en el mismo saco,
moran en la misma calle,
saco y calle del averno,
donde muere lo agradable,
mientras la cultura canta,
endechas, para liberarse.

jueves, 26 de enero de 2012

Versos de otras cárceles

LAS OTRAS CÁRCELES

Existen en nuestro rededor,
envueltas en los silencios,
cientos de pérfidas cárceles,
inspiradoras de miedos,
señoronas miserables
que ocultan míseros vientos,
aires de miseria humana,
brisas que quitan el sueño.

El catálogo de aquestas
es, por desventura, extenso,
extenso como la envidia,
dilatado como el miedo.

Hay cárceles de papel,
de las que se lleva el viento,
donde penan sus culpitas,
todos los sueños traviesos,
esos que no se resignan
a ser unos sueños serios.

Hay cárceles inventadas
por ruines carceleros,
parecen gratas moradas
y son infiernos auténticos,
y no necesitan rejas,
para sentirse uno preso.

Hay cárceles de locura,
donde el amor es perverso,
donde se rompe el amor,
donde se pierde el respeto,
donde se sufre y padece
el yugo del desencuentro.

Hay cárceles de plastilinas,
que hay que tomarlas en serio,
donde los niños padecen
daños, castigos severos,
en sus mentes, en sus almas
y en sus quebradizos cuerpos.

Hay cárceles aceptadas,
cuando corren malos vientos,
de soledades vestidas,
de ausencias y de desvelos,
de esperanzas reprimidas
y de ánimos por los suelos.

Hay cárceles pamplinosas,
llenas de alardes y cuentos,
de marchitos oropeles,
de pifias y caducos truenos,
en donde sus moradores
padecen delirio extremo.

Hay cárceles venerables,
dignas de todo respeto,
para aquellos que renuncian
a la basura, al estiércol,
de un mundo deshumanizado,
corrupto, falso y violento.

Hay cárceles sorprendentes,
sin guardias, ni carceleros,
sin rejas, ni cerraduras,
sin ningún impedimento,
allí está la libertad,
esperando tiempos nuevos.

Hay cárceles de poesías,
donde apresar miles versos,
dejemos algunos libres,
en estos claros momentos,
para jugar al olvido
y componer algo nuevo.

martes, 24 de enero de 2012

Versos encarcelados

LA CÁRCELES DE HOY

Las cárceles de hoy en día,
son un puro sucedáneo
de las prisiones arcaicas
que los hombres idearon,
para vejar a los hombres,
para purgar malos actos,
para sembrar la muerte,
para callar libertarios,
y nada tienen que ver
con las cárceles de antaño.

Sólo una sombra las une,
en su periplo macabro,
son amos de la libertad
del reo, del condenado.

Las cárceles de hoy en día,
son paraísos cerrados,
son jaulas de tez moderna,
son tenebrosos palacios,
son monstruos arquitectónicos,
son arcas del desahuciado,
donde nada se echa en falta,
ni lo eterno, ni lo humano,
ni el deporte, ni los libros,
ni la tele, ni la radio,
ni el condumio, ni los juegos,
ni el estudio, ni el trabajo,
y, si me apuran un poco,
ni el sexo, tan necesario,
sólo una maldición ronda,
estos lugares sagrados,
la falta de libertad,
el mayor bien del humano.

Una estólida pregunta,
hoy vuela por mi tejado,
por mi pobre y necia mente,
como un terco pajarraco:
¿Sirven estas nuevas jaulas
para curar condenados,
para sanar asesinos,
para limpiar el mercado
de pederastas infames,
de ladronzuelos y cacos,
de criminales de género
y de humanos sanguinarios?

Aquel que tenga respuestas,
que las cante alto y bien claro
que, los humanos de bien,
las estamos esperando,
en las calles, en los pueblos,
dolidos, desesperanzados.

sábado, 21 de enero de 2012

Versos de terror

LAS PRIMERAS CÁRCELES

Las cárceles se inventaron
para encerrar a los presos,
fueran mala o buena gente,
¡Qué más les daba a sus dueños!
Los hombres, sus inventores,
se sintieron satisfechos,
idearon habitáculos,
para santificar los miedos,
los horrores, los espantos,
los pavores, los infiernos,
para confinar al malo,
al criminal, a los necios,
al convicto, al enemigo,
al amigo no converso,
al desgraciado ignorante,
al sabio, por su talento,
al marica, al mal nacido,
al macho, por sus excesos,
al deforme, a la fulana,
al infiel , a los ateos,
todos los nacidos eran
carne de posible reo.

Los humanos ilustrados,
pájaros de mal agüero,
muchos nombres idearon
para estos lugares tétricos,
presidios, galeras, fosos,
calabozos, saladeros,
prisiones, celdas, mazmorras,
cámara de los tormentos,
penal, jaula, cuartelillo,
y quedaron tan contento.
Mis versos se han negado,
a nombrar los instrumentos
que los hombres empleaban,
sin ningún remordimiento,
para torturar al hombre,
en aquellos locos tiempos.

Las cárceles se inventaron,
en los albores del tiempo,
no se sabe para qué,
y para nada sirvieron.
Mientras los hombres seamos
lobos para el compañero,
mientras los hombres gocemos
con el sufrimiento ajeno,
mientras dañar y matar
sean cotidianos juegos,
aceptados por los hombres,
como un entretenimiento,
mientras brillen por su ausencia,
pesar y arrepentimiento.

¿Para qué aquellas cárceles,
y para qué nos sirvieron?

viernes, 20 de enero de 2012

Retratos


Estela y Clemen. Modesto homenaje al "bendito" que nos viene de camino.
Lápiz de color sobre papel.
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Versos añejos

FUIMOS Y SERÁN

¡Fuimos jóvenes los viejos!
aunque algunos desalmados,
graciosillos de horas pobres,
no crean lo aseverado,
pensando los cucamonas,
ignorantes desgraciados,
que siempre fuimos mayores,
que al nacer, dimos un salto,
un brinco, un bote, un respingo,
y hasta la vejez llegamos,
quedándonos a vivir,
sin juventud, ni pasado.

¡Y serán viejos los jóvenes!
sin vacilar, lo afirmamos,
es deseo, es esperanza,
es preciso y necesario,
aunque algunos de estos jóvenes,
perdidos y atolondrados,
amantes de los peligros,
mohínos despelotados,
tienen lejana la meta,
con tanto loco bandazo
y arriesgan vida y talento
antes de ser jubilados.

jueves, 19 de enero de 2012

Versos de inexistencia

LA CARTA

Pude escribirte una carta,
pero nunca tuve tiempo,
o quizás, fue tonta excusa,
pues jamás, yo quise hacerlo.

El caso es, que aquella carta,
que no gozó nacimiento,
pudo guardar esperanzas,
miles de felices sueños,
una triste despedida,
los placeres de un encuentro,
palabras comprometidas,
locuras de un nuevo verbo,
insustanciales decires,
profundos y bellos versos,
caricias de enamorado,
residuos de cruel desprecio.

El caso es, que aquella carta,
la entregué a los silencios,
al mundo de los arcanos,
a los brazos del misterio,
o quizás, nunca existió
en mi tardo pensamiento,
fue desvarío, dislate,
del amo de estos, mis versos.

martes, 17 de enero de 2012

Retrato


David.
Lápiz de color sobre papel.
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Versos de amistad

AYER

Ayer, hace sólo un rato
para el inventor del tiempo,
entramos a hurtadillas,
con pasos lentos, inciertos,
para ver que se “cocía”,
en este salón de juego,
donde la dócil palabra
es el mágico instrumento,
capaz de abrir mil ventanas,
de despertar bellos sueños,
de ser blasón, estandarte
de los locos, de los cuerdos,
de debates, de porfías,
de encuentros y desencuentros,
de grata comunicación,
de imágenes y recuerdos,
de una Melilla añorada,
musa de sentidos versos,
amante de lejanía
y lujurioso pretexto.

Ayer, hace sólo un rato,
para el inventor del tiempo,
nos sentimos como en casa,
recorrimos los adentros
de esta virtual morada,
gratificante sustento,
descubrimos mil amigos,
unos viejos y otros nuevos,
destapamos mil arcanos,
desterramos nuestros miedos
y nos dejamos llevar
por los aires, por los vientos
de una añorada Melilla,
madre de infantiles sueños,
amor prendido en la mente,
libidinoso deseo.

Ayer, hace sólo un rato,
para el inventor del tiempo,
una muy apreciada amiga
de este foro, suyo, nuestro
y de todos los que amamos
aqueste entrañable juego
de grata comunicación,
a los Repe, nos ha puesto,
a una altura inmerecida,
por las nubes, por los cielos
y ha invitado a otros amigos,
a tal reconocimiento,
produciéndonos rubor,
sofoco y bochorno, al tiempo,
pues sólo nos dedicamos,
con obligado respeto,
a defender la amistad,
a intercambiar sentimientos,
a crecer en libertad,
a airear los pensamientos,
a presentar nuestro hacer,
a escribir sencillos versos,
a practicar, a diario,
estos y otros muchos juegos,
esperando, sólo a cambio,
lectores y amigos buenos.

lunes, 16 de enero de 2012

Plumilla


Viena. "El anillo".
Tinta china sepia sobre papel.
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Versos de lejanías

EL FUTURO

Para los que aquí seguimos,
en este solar del tiempo,
el futuro siempre llega,
con pasos bastante lentos,
con lentitud programada,
como mezquino usurero,
andando a cámara lenta,
como los relojes buenos,
siempre con pasitos cortos,
jamás llegará corriendo.

El futuro es caprichoso,
anda despacio, sereno,
marca su ritmo seguro,
siempre ajeno a los excesos,
pasito, pasito a paso,
recorre pequeños trechos,
nadie altera su cadencia,
nada le produce nervios,
es aburrido, monótono,
es movimiento perfecto.

El futuro nada cuenta,
ama guardar sus secretos,
proclama exactitudes,
vive y muere en un momento,
oculta su porvenir
en oscuros recovecos,
se aproxima a los humanos,
con guiños de tiempos nuevos,
despertando en nosotros,
codicias de poseerlo.

sábado, 14 de enero de 2012

Romance. Segunda entrega

(Continuación)

La pequeña mira y mira,
la mente la tiene en blanco,
pasado unos segundos,
despierta de su letargo,
descubre junto al objeto,
un celeste viejo trapo,
con suma delicadeza,
lo coge con una mano,
pretende limpiar el negro
que cubre al objeto raro,
no sabe lo que se oculta,
bajo aquel negruzco manto.

Mas, cuando el trapo acerca,
despierta el negro sudario,
se mueve poquito a poco,
como el que está muy cansado,
y un inquietante siseo,
preludia un menudo llanto.
La niñita, sorprendida,
retira veloz el trapo,
volviendo otra vez la calma
y la quietud de hace un rato.

La curiosidad despierta
el valor y los redaños,
y la pequeña repite
aquel imprevisto ensayo,
obteniendo, de respuesta,
igualitos resultados,
el movimiento y la calma
se ceden sendero y paso.

La pequeña no renuncia,
deja, de momento, el trapo,
y busca por su cercanía
otro objeto, un cacharro,
que pueda desagraviarla
de aquel primerizo fiasco.
Cerca de una ventanita,
por donde el sol entra a ratos
la pequeña ha descubierto,
un conocido aparato,
que puede venirle al pelo,
que le viene ni pintado.
Se trata de una aspiradora,
pequeña, como un zapato,
que se usa para las pelusas
de los jerséis baratos,
que se llenan de bolitas,
en antes de contar cuatro.

La chiquita es bien despierta,
con atención y cuidado,
con presteza y gran soltura,
ha enchufado el aparato,
y con gran habilidad
lo acercó al ser extraño,
apretó el interruptor,
con la rapidez del rayo
y, en un tic-tac de reloj,
la negrura se ha tragado,
y aquella viva negritud,
aquel sombreado manto,
reposa en la barriguita
del orgulloso aparato.

Con el calor y las prisas,
y al sentirse atrapado,
las lágrimas derramadas
por aquel objeto extraño,
con los muchos punto negros,
con los muchos negros trazos,
con fuerza, se han mezclado,
dando lugar a una tinta,
de matiz tornasolado,
de color negro brillante,
del azabache tostado.

Busca final el romance,
hay un objeto sagrado,
que la pequeña sostiene
entre sus pequeñas manos,
es blanco como la nieve,
es un pequeño Diario,
de páginas inmaculadas,
que espera ser ilustrado,
por una preciosa niña,
con sus diarios arcanos,
con sus íntimos secretos,
con su vida , hecha retazos,
con una tinta azabache,
de puntos y bellos trazos.

Si la fortuna quisiera,
y lo permiten los hados,
me gustaría leer,
las páginas de aquel Diario.

viernes, 13 de enero de 2012

Romance en dos entrega

ROMANCE DE AQUEL DIARIO (Cuento poético)

Blanco nació aquel Diario,
con blancor inmaculado,
nívea tenía su alma,
molestaba tanto blanco.

Así se mostró al nacer,
así se mostraba al año,
sin mácula en sus adentros,
fastidiaba tanto blanco.

Mas una tarde cualquiera,
de un latoso calendario,
sonaron claros clarines,
llegaron malos presagios,
pequeñas oscuridades,
signos de negro ahumado,
puntos de oscuros instintos,
negruras de negros trazos,
manchitas de moho negro,
tenebrosos garabatos,
en callada tropelía,
corrían por el espacio,
se esparcían, como el polvo,
sobre todo lo olvidado,
algo, entre manos, traían,
algo andaban buscando,
ennegrecerle la tez,
a aquello que fuese blanco,

En un diminuto estudio,
lugar de ocio y trabajo,
descansaba una chiquita,
tendida sobre un camastro,
soñando las misma cosas
que sueñan otros muchachos.
En un instante preciso,
ni célere, ni despacio,
irrumpe en la habitación,
un siseo, algo extraño
que, por bajo de la puerta,
como el viento, se ha colado.
Es un enjambre negruzco,
de lunares apilados,
es una informe bandada
de puntos y negros trazos,
que se mueve por los aires,
con soltura y desparpajo,
rozando cosas, objetos,
pero apenas sin tocarlos,
trae la lección sabida,
un objeto anda buscando.

Al llegar a los oídos,
aquel eco tan extraño,
aquel chocante sonido,
la pequeña ha despertado
y con ojos sorprendidos
mira aquel objeto raro,
que no deja de moverse
de un lado para otro lado.

Pasados unos segundos,
para la niña, un buen rato,
aquella extraña criatura
sobre algo se ha posado,
parece un pequeño libro,
blanco de blancores blancos.
En un suspiro de tiempo,
al objeto han rodeado,
cubriéndolo de negrura,
de un negror que hace daño
a los ojos de la niña,
que miran sobresaltados.

Aquella negruzca sombra,
después de robarle el blanco
a aquella especie de libro,
parece que se ha calmado,
ahora es negra quietud,
negro tizón requemado,
inmóvil y ennegrecido,
pequeño negro sudario.

(Continuará)

miércoles, 11 de enero de 2012

Versos íntimos

VACÍO

Vacío, vacío, vacío,
me levanté esta mañana,
Vacío de todo aquello
que traen las alboradas,
vacío de impúber sueño,
hijo de la madrugada,
vacío de alegres trinos,
que siempre suenan al alba,
vacío, vacío, vacío,
Vacío de cuerpo y alma.

Sentí vértigo de vacío,
vacío de malas entrañas,
no sentía mi latir,
tan vacío me encontraba,
que me aferré a los silencios,
que junto a mí, cabalgaban,
pugnando por escapar
de aquella terrible nada,
vacía, como yo, de todo,
transparencia inmaculada.

Descubrí mis oquedades,
al filo de la mañana,
y me circundé de espanto,
y de horas espantadas,
vacío recorrí las sendas
de la acre desesperanza,
vacío, vacío, vacío,
a punto de estallarme el alma.

Un hilo de luz divina,
hilado junto a la nada,
marcó un punto y aparte
en aquel vacío canalla,
llenando el hueco vacío,
con una banal migaja,
un punto insignificante,
una pobre musaraña,
que rompió, en muy buena hora,
el vacío que me mataba.
Aquel puntito de luz, creció
como la alborada,
como tenaz levadura,
como despierta mañana,
como el alba matutina,
como rayo de esperanza,
y, al tiempo, el pobre vacío,
vacío, como la nada,
fue llenándose de voces,
de canciones, de baladas,
de colores encendidos,
de imágenes y de estampas,
y de ardorosos calores
de llamas apasionadas.

Y en un instante finito,
noté, preso de una lágrima,
pequeña como el puntito
de alba luz esperanzada,
que el vacío se había ido,
que el vacío ya no estaba.

martes, 10 de enero de 2012

Retrato


Antonio Fernández Pineda, matador de toros sevillano. "Buena gente" ¿Verdad, María?
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Versos fríos

SEGUIDILLAS DE ENERO

Por el camino vienen
fríos de enero,
cargaditos de frío,
sí, de frío hielo.

Nos traen mil recados
del frío invierno,
que saben a mentol
y a besos frescos.

No salgas a la calle
que viene enero
con capuchita blanca
y malos vientos.

Enero se presenta
por el Sequero
con bigote escarchado
y blancos pelos.

Dale la gorra, madre,
dale el sombrero,
para que no blanquee
su pelo negro.

Por el camino vienen
mil aires frescos,
tápate la carita,
tú, mi lucero.

No contemples la nieve
con ojos tiernos,
que se pueden quemar
con su albo fuego.

domingo, 8 de enero de 2012

Retrato


Nuestra querida Esther.
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Versos de añoranzas

¿DÓNDE MORAS, INOCENCIA?

¿Dónde moras, inocencia?
¿Dónde encontrarme contigo?

En una vieja mañana,
perdida en añejo olvido,
marchaste paloma blanca
dejando huero tu nido.
El niño que era tu dueño,
frágil espiga de trigo,
creció como crece el viento
en los inviernos más frío,
ausente de tus miradas,
de tus risas y suspiros,
de tu creer sin fronteras
y de tus alegres trinos.
En días largos y cortos,
con finos y recios hilos,
fue tejiendo con torpeza
los más variados tejidos,
para cubrir las durezas,
regalos de su destino.

Desertaste, alba inocencia,
por ignorados caminos,
dejándolo sin escudo,
desorientado, perdido,
sin entender los albures,
los riesgos y los peligros
que la vida le entregó
desde que fuera bien niño.

Trompetas de algarabías,
anuncian por los caminos,
cortejo de viejos Reyes,
de alba inocencia vestidos,
de inocencia son sus pasos,
inocentes sus amigos,
pregonan clara inocencia
de las que gozan los niños,
de las que encienden los ojos
y les dan luces y brillos.
Tantanes de sones dulces,
proclaman con sus sonidos,
la llegada de unos Reyes
desde los sueños finitos,
de esos que se van marchando
poco a poco, calladitos,
dejando regusto amargo,
envidias y largos suspiros.

¿Dónde moras inocencia?
Quiero que vuelvas conmigo.

martes, 3 de enero de 2012

Versos de versos

POETA

Poeta de pobres días,
juglar de tiempo perdido,
¿Por qué juegas a ser alguien
entre despechos y olvidos?

Poeta de ricos sueños,
señor de versos esquivos,
¿Por qué cantas tus canciones
al pie del árbol dormido?

Poeta de áureas brisas,
amante del verbo herido,
¿Por qué ocultas tus lamentos,
en antros de mudos gritos?

Poeta, pobre poeta,
de la soledad, amigo,
desentierra las palabras
que en tus noches se han perdido
y dedícame unos versos
de rimas y sones tibios
para que mi sedienta alma
deguste tus dulces trinos.

domingo, 1 de enero de 2012

Versos de encuentro y despedida

Hoy, ración doble.
Versos tomados del libro de poemas "365 y una poesías"

ENCUENTRO

Os mirasteis a la cara
en un segundo certero,
él, agachó su cabeza,
tú, iniciaste el vuelo,
él, con marcadas arrugas,
tú, estrenando nuevo cuerpo,
él, suspiro; tú, esperanza,
y los dos, hijos del tiempo.

El Año viejo, con pena,
entregó ya su relevo
y cabizbajo camina
hacia un más allá eterno,
para perderse, por siempre,
en un libro blanco y negro,
ilustrado torpemente
con memorias y recuerdos.

El Año Nuevo, gozoso,
celebra su nacimiento,
envalentonado cuenta
sus esperanzas, sus sueños
y, como chiquillo, juega
con los días venideros,
ajeno a los avatares
que el destino, traicionero,
grabó en su flamante piel,
sin él, llegar a saberlo.

¡BUEN VIAJE Y... HASTA NUNCA!

El Año Viejo se fue
como hoja que lleva el viento,
llevándose en su mochila
estampas y cromos viejos,
saboreados con prisas
entre disfrutes y miedos,
dejándonos los aromas,
perdidos en loco tiempo,
de brevedades vividas,
de enmadejados recuerdos.

Vestido con ricas galas
y con achaques de viejo,
sorbió sus últimas horas,
se tragó su último aliento
y, entre sones de campanas,
con andares bien ligeros,
lanzó profundo suspiro
y nos dio un adiós eterno,
con fecha de caducidad
anunciada hace algún tiempo.

Cicatero fuiste, amigo,
mientras fuiste compañero
y, al momento de marcharte,
de iniciar póstumo vuelo,
poco nos dejaste escrito
en tu postrer testamento,
pleno de crecidas dudas,
de incontrolados deseos,
de desconocidos pasos
y de caminos inciertos.

¡Buen viaje, hermano querido!
y... ¡Hasta nunca, majadero!
me robaste, en un descuido,
un álbum lleno de sueños
en los que, feliz, guardaba
mis más cercanos anhelos
y las páginas escritas
al pairo de un año entero.