OTRO DE LOS QUE PUDO SER, PERO NO PUDO SER POR MOR DE LA MALA POLÍTICA
En el siglo pasado, concretamente en el año 1994, este cartel participó en el concurso público para anunciar las fiestas de Septiembre de Melilla. En él se contempla al fondo el antiguo cargadero de Mineral y tras el mismo, el rincón conocido en la ciudad como El Pueblo o Melilla la Vieja. La Playa de San Lorenzo nos va acercando a un símbolo de nuestra ciudad, el ánfora fenicia que los arqueólogos descubrieron en cantidad y que testimonia su origen, y de ella saliendo una simpática figura con el traje típico de la ciudad moderna; brindando con una copa con el deseo de que esa fiesta y las venideras sean extraordinarias, sin olvidarse de otro símbolo en su regazo, el del escudo de la ciudad.
En esta ocasión no fuimos profetas en nuestra tierra, a pesar de contar en principio con todas las bendiciones del mundo, menos una...; la que sí tenía el cartel del ganador o de la ganadora, que con el paso de los años no recordamos quién fue ni como fue el mismo, pues una cosa nos enseñaron desde nuestra niñez y que siempre la tenemos presente, es aquello de tener sabiduría cuando se pierde.
Ha pasado algo más de un cuarto de siglo y siendo sincero y pecando de inmodestia, nos sigue gustando.
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