262 .- EL BENJAMÍN DEL FABRICANTE DE MARIPOSAS
CAPÍTULO OCTAVO
BEN ALÍ poco disfruta
del encuentro tan deseado,
pues sus padre, que lo ven,
a la parca se entregaron
en noche de fríos silencios,
de augurios bien amargos,
que déjanle en soledad
con la tristeza del huérfano.
El benjamín BEN ALÍ
triste anda y deseperado,
no sabe donde encontrar
el más mínimo descanso,
deambula como un demente
sin saber qué está buscando,
topándose a cada paso
con los recuerdos de antaño,
que aumentán más su penar
a límite insospechado,
pierde la noción del tiempo
y siempre marcha vagando,
cada jornada que pasa
el vivir está olvidando,
muérese poquito a poco
como alma que lleva al diablo.
Llegando el día que se encuentra
totalmente derrotado,
abandonado a su suerte
a la muerteestá esperando...
Con grande debilidad,
sbre manta recostado,
sin fuerzas para moverse,
con los ojos bien cerrados,
siente como la vil parca
su aliento le está soplando;
de pronto, algo suave y frío
se deposita en su mano,
con esfuerzo abre sus ojos,
la dama no tiene a su lado,
una hermosa mariposa
en aquella se ha posado.
Santa Cristina, 28 de Agosto de 2024
No hay comentarios:
Publicar un comentario