111 .- ¡QUÉ FAMILIA LA MÍA! ( II )
mi padre natural,
pero se gasta menos
que un abstemio en un bar,
siendo más que usurero
artista en el ganar,
goza como banquero,
aumentando su capital,
sin pensar que su tiempo
un día se acabará.
En el opuesto extremo,
mi amada madre está,
ya que gasta sin freno
lo de mi padre y más.
puesto tiene un agujero
a la hora de gastar,
que el ozono es pequeño
en el orden terrenal,
pensando que su tiempo
también se terminará.
Tengo un hermano soltero
que ejerce de pachá,
amante del enredo,
con fobia a laborar,
algo más que gamberro,
aprendiz de Satán,
fraile y buen cocinero
en timpos de yantar,
bastante pendenciero,
libador y holgazán,
que gasta con saleo,
como hijo de papá.
El Viso del Alcor, 16 de Noviembre de 2023
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