Jueves, día 7 de Diciembre
LAS HOGUERITAS PUDIERON ARDER POR UNA PEQUEÑA TREGUA CLIMATOLÓGICA Y EL CINISMO DE ALGUNOS POLÍTICOS
Los niños se lo merecían por su esfuerzo y su ilusión, porque incluso en días antes, contra vientos y aguaceros, fueron acumulando maderos para quemarlos en las vísperas de la Inmaculada, como es tradicional en esta localidad. Es cierto que la humedad de los leños dificultó algo su encendido, pero nadie puede contra la niñez, pues de haber llovido a chorros, la hubieran alumbrado en sus mentes.
El tiempo a última hora no les quiso jugar la faena y sin previo acuerdo se produjo la tregua suficiente para que la ilusión se hiciera realidad y el misterio del fuego, otra noche, se elevara al cielo.
Decir en privado algunas frases, por muy disparatados o atrevidas que sean, no tienen mayor transcendencia; pero lanzar estas en medio tan seguido como la televisión es demasiado atrevimiento o fruto de la desfachatez o la cara dura; en especial cuando se dicen y el rostro permanece totalmente inalterable.
Fue un hombre importante del partido del gobierno, el doctor Galeote, el que con el mayor descaro la soltó y se quedó más tranquilo que un San Luis.
El motivo del programa "Punto y aparte" era el de la cuestión de la repetición de las elecciones en Murcia, Pontevedra y Melilla, incluso con algunos de los afectados presentes, senadores y diputados que casi lo fueron y que posiblemente vuelvan a serlo; así como de la necesidad de modificar algunas cuestiones en torno a las mismas.
Ya al final del programa se descolgó con su bobada: "Pues ya ven ustedes que en esta ocasión ha sido la vez que más rápidamente se han conocido los resultados electorales". A lo que uno de sus oponentes le respondió con cierta sorna: "Efectivamente, fíjese que se sabrán antes de que pasen unos tres meses".
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