Lunes, día 23 de octubre
QUE DECIDAN ELLOS, QUE PARA ESO YA SON MAYORES
Ya
he reflexionado sobre el asunto este y tengo la impresión de que somos los
mayores los que en nuestro intento de mejorar a los hijos, lo protegemos en
exceso y pensamos y decidimos por ellos, sin tener en cuenta que van creciendo
y ya están en la edad de decidir, si no en todo, en algo que les afecte
directamente.
Fuimos
de nuevo al dentista y en un alarde de sinceridad, porque es difícil reconocer
las cosas cuando a uno no le salen como desea, nos dijo este que no había dado
resultado satisfactorio el proceso llevado a cabo con los “mellis” y que la
única solución que veía después de todo los andado era el ponerle la pieza
fija, que tanto afea la dentadura mientras se
lleva la misma y que ha creado tantos complejos infantiles, sobre todo
en las niñas. Podíamos haberlo decidido sobre la marcha, pero no lo hicimos,
pensando que al llegar a casa y sin presiones de ninguna clase, decidieran
ellos.
No
sé lo que al final dirán, aunque me temo que por esa cualidad suya de ser
mellizos se produzca una situación no muy agradable para ambos. Daniel podría
pasar sin ella y se vería obligado porque Alejandro, al que sí le hace falta,
no se conformara; recordándome esto aquel verano en que mi hermano no tuvo
éxito en su examen de ingreso y fue suspendido, por lo que se vería obligado a
asistir a clase; negándose a ello si yo no le acompañaba. Al final prevaleció
su postura y me tuve que fastidiar yo, acompañándole a clase; claro que esto me
benefició también a mí por aumentar mi base para el estudio.
Quizás, pienso yo, si su decisión fuera afirmativa por parte de los dos, ninguno de ellos se arrepentirá en el futuro; pero sigo pensando que deben decidir ellos.
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