Domingo, día 1 de octubre
VENTAJAS E INCOVENIENTES DE LA EXCESIVA
IMPORTANCIA A LOS PEQUEÑOS PELOTEROS
Jugaban ayer tarde en categoría infantil de fútbol los pequeños del Sevilla CF con los chavales de aquí y antes de comenzar ya estaba cantado el resultado por diferentes razones: la primera, porque los pequeños, que ya no lo son tanto en estatura, sí en edad, son escogidos y que van siempre acompañados de sus padres, que ven en ellos grandes figuras del balompié y que además son mimados por estos y por sus acompañantes deportivos hasta tal punto que con facilidad terminan por creérselo; la segunda es que los colegiados salen al campo preocupados por el nombre de la entidad, el Sevilla FC nada más y nada menos; porque pelean como jabatos para que se fijen en ellos, de tal manera que no se conforman con ganar, sino que quieren humillar a sus contrarios, chavales como ellos, con habituales goleadas y porque son mejores, que todo hay que decirlo.
Sin
embargo, hay algo que me disgustó sobremanera y es el aire chulesco de muchos
de ellos, que amenazaban a sus contrarios, aun contando con la ventaja de su
mayor envergadura, se encaraban con el público, protestando frecuentemente al
árbitro y a los otros jugadores, simulaban lesiones y al terminar el partido
alguno se dejaba caer con que jamás les iban a ganar…Buena carrera llevan.
En
lugar de considerar el deporte a este nivel como un juego, que puede producir
sencillamente un goce al que lo practica, de servir para hacer amistades, de
conocer otros pueblos y ciudades y apartarse con él de todos los riesgos que
hoy desgraciadamente nos presenta la sociedad en que las ha tocado vivir, sólo
piensan en vivir del fútbol, sin tener en cuenta que de tantos que juegan en
estos equipos grandes muy poquitos son los que convierten ese sueño en realidad.
No
nos equivoquemos los mayores y contribuyamos a confundir a estos jóvenes, enseñándoles
caminos que no siempre son los más adecuados.
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