Viernes, día 22 de septiembre
OTRA
ESCAPADA NOCTURNA A SEVILLA
Delante del gorrilla de turno
guardamos un paquete en la parte posterior del coche y al ir a recogerlo nos
encontramos con que habían forzado la cerradura, craso error el nuestro. ¿Pero
si uno no puede ya confiar en el guardacoches en quién se puede confiar? Nos
reunimos en el estudio de Rafael Espínola, profesor de la Escuela Superior de
Bellas Artes de Sevilla, la de Santa Isabel de Hungría, para pasar un rato con
ellos y porque lo habíamos proyectado en los días que pasamos juntos en Isla
Cristina. El lugar es encantador, con sus callejuelas estrechas y empedradas,
con el sabor de un pasado más seguro que el actual, con rincones de encuentros
llenos de la placidez de la noche, en la misma Plaza de las Cruces, sin ruidos
de coches, incluso a altas hora interrumpido el silencio por el riego de la
manguera de agua al chocar esta con el suelo y con las farolas que alumbran lo
justo.
Pasamos un buen rato, de esos de los
que te evades de muchas otras preocupaciones y con relación a la obra de
Rafael, elogiado por todo el mundo, especialmente por aquellas que quieren dar a entender que saben de arte,
que te hacen reflexionar acerca de que no es oro todo lo que reluce y que
existen muchos retablos de las maravillas, sobre todo en la pintura.
No hay comentarios:
Publicar un comentario