lunes, 7 de noviembre de 2022

RETAZOS DE UN AÑO, 1989, DÍA A DÍA

Miércoles, día 1 de marzo

                    OTRO TÍPICO TÓPICO, EL DE EL MUNDO ES UN PAÑUELO


                    Suena por enésima vez el teléfono. Ya está bien por hoy, parece que no sirvió de nada cambiar el número de este, por razones que ya y ahora no vienen al caso.

                Una voz desconocida al otro lado de la línea, voz de hombre mayor y de pueblo con un deje bastante reconocible, de Mairena...

-       Espere usted, por favor, que le va a hablar mi señora, ¿Es usted Don José? ¿El alcalde?

    Otra voz desconocida al otro lado, ahora de mujer mayor y de pueblo, con deje igualmente reconocible, de Mairena.

-       ¿Es usted Don José, el alcalde?

    Y me explica sin perder el usted: Mire usted, que estuve hace unos días en Valencia, con el Imserso, y me encontré con una señora de Galicia que le conoce. Me dijo que usted podía haber sido su yerno. Se llama Martirio – como la artista de la peineta, esto lo añado yo cuando escribo y recuerdo que se trata de Martirio de Fábregas – y me dijo que usted era de Mairena - Claro, sigo añadiendo, que confundir Mairena con El Viso, las dos del Alcor, es cosa lógica para una gallega -, y me dio muchos saludos para usted. Me insistió que le diera también muchos besos de su parte y de momento me los dio a mí, que si no me vengo todavía me está besando. Mucho le debió querer a usted. Y me dijo que usted era maestro y cuando he llegado a Mairena, por medio de otra maestra, me enteré de que usted no vive en Mairena, sino en El Viso y me dijo también que usted ahora es el alcalde y por eso, después de llamarle a usted ya he cumplido su encargo.

    Le agradecí la atención que tuvo a la buena señora y me dijo, no paraba, que si pienso llamarla que no lo haga ahora porque se iban a Mallorca.

    Supongo yo que irían formando parte de esos viajes que organizan ahora para la Tercera Edad.

    Y cuando me disponía a colgar el teléfono, volví a oírla de nuevo para  decirme: Perdone usted, se me olvidaba decirle que también le recordara que se había casado su hija Ana.

 

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