El primer Hijo Predilecto de El Viso, a título póstumo, porque ya se nos había a su Cielo antes de que el Ayuntamiento le otorgara este honor, fue JOSÉ MARÍA DE LOS SANTOS LÓPEZ, hijo que fuera de D. Manuel, el Médico, y de Doña Alcora, la de los López; hermano de DIEGO DE LOS SANTOS, otro Hijo Predilecto de esta villa, galeno como su padre y político por sentimiento, y de MANOLO DE LOS SANTOS, uno de los más jóvenes letrados del país, que además de Notario cantaba como los ángeles flamencos de los coros celestiales.
El caso de José María es distinto; un día el Señor llama a sus puertas, a las de su corazón y su mente, convirtiéndose en médico de almas, almas de hombres y de almas de pueblo, del suyo, y como es joven y tiene tiempo para ello, se prepara concienzudamente y como quiere ser otra voz en el desierto, sin desánimo, como aquel otro Juan, encuentra piedras en su caminar; algunas de ellas colocadas por los mismos suyos de arriba, y sigue caminando, perdonando incomprensiones. Tiene claro cuáles deben se su preocupaciones, su gente y su tierra, y a ellos da luz, con una vida ejemplar, con unos pensamientos arropados de justicia social, con un desbordado amor hacia los que sufren, a los que le necesitan de verdad..., y de tanto sufrimiento, otro día se le rompe el corazón; pero en su tremenda generosidad nos deja su idealismo, su utopía, sus escritos, su manera de ser y sobre todo, su amor a su tierra, a Andalucía.
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