NUESTROS DIBUJOS

                             Muchos han sido los viajes que junto a un reducido grupo de familiares y buenos amigos hemos realizado a lo largo de nuestra vida, tratando de que por lo menos uno al año no nos faltara, y con los destinos más variados, especialmente a rincones escogidos de nuestra península e incluso atreviéndonos en ocasiones a sobrepasar nuestras fronteras y residir en lugares llenos de encantos, de países cercanos. 

                             Viajes de los que guardamos gratos recuerdos y los dos hermanos hemos tratado siempre de contar, como herramientas de "trabajo", lápices, gomas, bolígrafos, bloc de notas y de dibujos, por supuesto de pequeños tamaños y máquina fotográfica, sustituida a veces por las tabletas o por los móviles.

                             Y como cada loco va a lo suyo, en los ratos libres, sobre todo en momentos de después de la comida, ya que nos somos practicantes de la reparadora siestecita, aprovechamos para utilizarlas, aunque con fines distintos, y teniendo en cuenta la paz encontrada en algunas de las casas rurales que nos sirvieron de residencia, alejadas del mundanal ruido de las grandes ciudades. 

                            Clemente deja volar su mente, ya que siempre fue muy creativo, y dedica este tiempo a realizar lo que llamamos "monos", de temas que le vienen y que muchos de ellos se quedarán grabados en su pequeño bloc para siempre o que puedan servirles en otro momento como base para otras obras  más trabajadas; en tanto que yo lo dedico a tomar notas sobre el viaje, especie de reducido diario, que me servirán, al volver a casa, para dar vida a mis libros de viajes, que ya superan la cifra de la treintena.

                              Pues bien, hoy, en este capítulo de los dibujos, asomamos algunos de estos monos, sin ninguna pretensión artística, pero que sirvieron en su día para pasar ocupado el tiempo de ocio, lo que viene a demostrar, que a pesar de nuestros muchos años, no podemos estar sin hacer nada.