HOY TRAEMOS A ESTA VENTANA NUESTRA A UN BUEN AMIGO, MUY CONOCIDO EN EL PUEBLO, POR LOS MUCHOS AÑOS QUE TRABAJÓ EN LA FARMACIA DE LA CALLE REAL, LA DE SU PADRE, DON PEDRO DE LOS SANTOS, Y POSTERIORMENTE EN LA MUELA, CON SU HERMANA "ADA", HASTA QUE LE LLEGÓ SU MERECIDA JUBILACIÓN.
Es esta una especie de boceto de caricatura, como veréis rápida y sencilla, a lápiz, y como decíamos al principio, de nuestro amigo ALFONSO DE LOS SANTOS SÁNCHEZ BARBUDO, más conocido en nuestro pueblo como Alfonso, el de la Botica.
Personaje peculiar de El Viso, con un gracejo natural, hombre de dichos y refranes, algunos hasta inventados por él, y que sabía tratar al personal que caía en sus manos, por su excelente trato.
Hombre también de las mil y una anécdotas, vividas o contadas por otros, que él las hacía propias, con el que hemos pasado muy buenos ratos.
Que hasta fue capaz de hacerse aprendiz de ganadero y amante tanto de los coches y buen entendedor del tema, el de los vehículos, que no le importaba hacerse un montonazo de kilómetros para atender a sus vacas, allá por tierras serranas, las de Alájar.
Cuando se jubiló se marchó a vivir a Sevilla, pero últimamente volvió a sus raíces, haciéndose un par de pisitos en el local que ocupó durante muchos la farmacia de su padre y aunque está algo achacoso, como todos los que ya tenemos años hasta para regalar, no ha perdido el humor. Aunque eso de tener muchos años es una clara y cruel ironía, ya que los que ya hemos cumplido, no los tenemos, se nos fueron, engañándonos envolviendolos en los recuerdos, y los que tenemos sólo Dios lo sabe, y me refiero a los que nos quedan por vivir...
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