viernes, 26 de octubre de 2018

Al rescate de Calabuig 2



Jueves, 13 de septiembre de 2018.
A 252días …

¡QUÉ “JARTURA” DE COHETES!

     Todo perfecto. La Patrona, Reina Coronada, Alcaldesa Perpetua, Virgen de los Alcores y demás merecidos títulos, más vistosa que nunca, más arropada, más acompañada, más vitoreada que otras veces. Su paseo triunfal por las calles de su pueblo, El Viso del Alcor, no necesita comentarios favorecedores, ni bendiciones, ni aplausos, no precisa reconocimientos, afirmaciones, ni credos, fue la expresión más sencilla y más grandiosa del encuentro de un pueblo con su Madre querida. Pero… ¡Qué “jartura” de cohetes!

     El pueblo,  sabio cuando  quiere y puede, se puso tibio con el chocolate de la víspera. ¡Qué no fue solo el chocolate! ¡Qué hubo de todo! Y, el día grande, no faltó el mejor catálogo de potajes visueños. Y nos volvimos a poner más tibios todavía. Y no faltaron las pringas, cada una de su padre y de su madre, con nombres y apellidos. Y el potaje no llegó sólo, vino , como de costumbre, muy bien acompañado de ricas viandas, de postres exquisitos y ¡Vaya usted a saber!

    Pero… ¡Que “jartura” de cohetes!

    El tiempo se sumó complacido a la Fiesta. Se pasó un poquito con el calor. Pero bien se merece y se soporta  un poquito de sudor, que un chaparón de los de algunos malajes años, ya  pasados y olvidados. El ambiente, más vivo que otros años. Más gente que nunca y con caritas de estar a gusto, disfrutando de su Patrona. Despacito en su caminar, como debe ser, que un año de espera es mucho tiempo para el que espera.


     Pero… ¡Qué “jartura” de cohetes!


  Y para que no haya enfados de los cohetes, ni de tantos coheteros visueños, es bueno dedicarle a ambos un breve poema.

                       COHETES

     Cohetes de viejos tiempos,
almas de altivos voceros,
obligados asistentes
a los festejos señeros,
acostumbrados a ser
los gallos más tempraneros,
ocupados en llamar,
con un persistente empeño,
a vecinos, visitantes,
nativos y forasteros,
felices enamorados
de ALCORA, dulce embeleso.

     Cohetes madrugadores,
gotas de sonoros truenos,
surcan con firme volar
bravos aires alcoreños,
henchidos, en el papel,
de esperados pregoneros,
pregoneros celestiales,
pregoneros de altos vuelos,
despertadores festivos,
en Romería de ensueño,
de ALCORA, Virgen sin par
y de todos sus romeros.

                Cohetes de celebrar,
de conocidos siseos,
antesala inevitable
de su ronco parlamento,
siempre prestos a llamar
a rezagados visueños.

     Cohetes de alegre estar,
por ser ellos los primeros
en abrazar a su ALCORA,
Reina de regio universo,
Señora de los Alcores,
Dama de nardo y romero.

     Cohetes anunciadores,
con trinos de duro acento,
rompen, en su caminar,
el silencio de los cielos,
hurtándole a rico Alcor
migajas de tibios sueños,
trocados, al despertar,
en fervorosos festejos,
regalos del corazón,
obsequios de sabio pueblo
a tan egregia Patrona,
ALCORA, su amor eterno.


No hay comentarios:

Publicar un comentario