viernes, 20 de septiembre de 2024

VIVENCIAS DE UN AÑO MÍTICO, 1992


JUEVES, DÍA 5 DE NOVIEMBRE

EN EL DESPACHO DE ALEJANDRO COTTA

                    Ya nos citaron para el juicio, que será el día 25 del presente mes, y por ello fuimos al despacho del abogado Alejandro Cotta, acompañados de Clemente hijo, sus padres, y de Alejandro, nuesto hijo, para que conocieran a su defensor y este a los "acusados".
                    Según nos comentó uno de los motivos del juicio es qu llamaron "prepotentes" a los policías, palabra de la que nuestros hijos desconocían su significado; así como que Clemente había golpeado a uno de los agentes (con tanta mala fortuna, digo yo, que se dio el golpe en su propio ojo, que aún conservaba su señal) y que se habían resistido a la "autoridad", que al falsear los hechos demuestra tenerla escasa o casi o nula, descalificándose ellos mismos por completo.
                    Alejandro sigue sin darle importancia; sin hacer nada, lo peor sería que tuvieran que pagar una multa de 25.000 pesetas. Pero que él esta dispuesto, caso de que el fiscal no retirara la acusación, de ir a por los policías, ya que fueron ellos los agresores  y no los agredidos.
                    Si nunca fueron de mi devoción y contaron con mis respeto, ahora  han bajado muchos enteros y desde luego que se lo dijeran o no, su prepotencia estaba patente y ganada a pulso; y lo que más lamenta uno es ese estado de impotencia en que te encuentras en hechos de este tipo, como el que pasaron mi hermano Clemente y su mujer, Rosa, en la noche de autos, teniendo incluso que rebajarte al alguien que sólo tiene como como credencial el ser policía, investido de un poder en algunos casos, como este, no se sabe ejercer.


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