261 .- EL BENJAMÍN DEL FABRICANTE DE MARIPOSAS
CAPÍTULO SEXTO
Para colmo de sus padres,
MUSTAFITA, que era el cuarto
de los hijos que tuvieron,
siempre fue el más grande trasto,
cosa que de corta edad
él ya lo venía anunciando,
ladronzuelo desde niño,
no porque le faltara algo,
sino por puro placer,
el que encuentra en lo robado.
MUSTAFITA, que es pequeño,
que no mide casi un cuarto,
tiene el vozarón de un hombre
y el más soez vocabulario,
pelea por cualquier cosa
y miente como un bellaco;
a los suyos no respeta,
no se fía de sus hermanos,
a su madre, Candela, odia,
como a nadie hubo odiado,
porque mucho le reprende
con gran acritud, sus fallos
y para mayor desdicha
búrlase del padre anciano,
teniendo al ueno de Alí
por chocho y descerebrado
porque pasara su vida
con mariposas jugando,
metiéndolas en cajitas
como si fuera un chiflado.
No podía terminae bien
aquel ser ruin y malvado,
y una noche, el suyo cuerpo,
en el río lo encontraron,
con gran zurrón con dinero,
en su cuello bien atado,
dinero que todos saben
que a sus padres había hurtado.
Santa Cristina, 26 de Agosto de 2024
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