LUNES, DÍA 27 DE JULIO
RECONOZCO EL MÉRITO
Es habitual entre los cristianos practicantes el Confesarse antes de recibir la Comunión; algunos de estos se habitúan a ellos de tal manera que movidos por sus deseos de recibir a Cristo en la Eucaristía así lo hacen y otros que por cumplir con este precepto, antes obligatorio, se relajan algo, pero no se olvidan del arrepentimiento y el pedir perdón por sus culpas.
Otras personas y fruto de su educación reparan en pedir perdón, que es lo mismo que excusarse, por todo; aunque a veces no sea necesario.
Y no faltan aquellas personas que les cuesta un verdadero mundo el pedir perdón; aunque lleguen a reconocer que no estuvo bien lo que se hizo, incluso están arrepentidos de ello.
Entre estas últimas está Adela, que sin embargo, ha tenido el coraje , cosa que supongo conociéndola infinito hacerlo y así ella misma lo manifestó, incluso delante de nuestros hijos.
Dando un paso importante adelante. Ahora, a nosotros, nos corresponde valora, además de comprender, su gesto, esta actitud que ha tenido, y por nuestra parte estar también dispuesto a dar otros pasos, rompiendo con algunas ataduras de las que a veces no queremos escapar.
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