miércoles, 20 de marzo de 2024

VIVENCIAS DE UN AÑO MÍTICO, 1992

 
VIERNES, DÍA 29 DE MAYO

¡EL PARAÍSO SOÑADO!

                    Me quede helado con las declaraciones de un marroquí, de los del Norte, de nuestro antiguo Protectorado, ante las cámaras de Canal Sur, cuando pretendía justificar el porqué  de tanta emigración suicida desde ese rincón del mundo.
                    En el pseudoprogreso de su país les llegó también la televisión. No muy conforme con la suya, ya pueden sintonizar todas las cadenas nuestras y quedan alucinados con lo que ven, especialmente los programas de concursos.
                    El mensaje que reciben es maligno e irreal, y con la simpleza de la lógica del que pasa hambre, se plantean el encontrar el paraíso soñado, que nada tiene que ver con el prometido por Mahoma, ni con el anunciado por su mismo monarca, Hassam II; y este paraíso al que se llega, si se llega,por medio de una patera, después de ser engañado en el precio también - ¡cuánto negocio sucio y cuánto desalmado suelto! -, que a veces te obliga a tirar ahorros de muchos años y más privaciones, a vender tus escasas propiedades o a lanzarte a las fauces de un crédito que no piensan ni podrán pagar; y con destino a Andalucía, que tampoco tiene nada de añoranza, de nostalgia y reivindicación; pero que para ellos es encontrarse en una tierra maravillosa por la sencilla y simple razón de que en dichos concursos te dan millones por saber el precio justo, por ejemplo, de unas patatas y otros cosas cotidianas.
                    Frase lapidaria que tira por tierra cualquier argumento de que el hombre es el rey de la creación.
                    Mejor dejar el bolígrafo en el escritorio y cerrar la agenda... 



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