miércoles, 14 de febrero de 2024

VIVENCIAS DE UN AÑO MÍTICO, 1992

 
VIERNES, DÍA 24 DE ABRIL

LA FERIA DE MAIRENA

                    El uso de la "y" en el nombre de esta localidad vecino, se lo dejamos a Eusebio, que con tal de figurar y llamar la atención es capaz de todo; hasta de lo abonarse a participar "penenne" en el pregón, que por cierto, no agradó mucho a los maireneros.
                    Estuvimos el miércoles al mediodía en el ferial y nos atendieron de maravilla, porque para eso estábamos en su feria, en la primera de todas, en la suya y única.
                    Cada pueblo entiende sus fiestas de manera peculiar y Mairena no es una excepción, teniendo como principal característica la de hacer sólo y a lo grande, la suya.
                    El jueves, después de asistir a la inauguración del bar nuevo cercano al recinto ferial nuestro, el que sustituye al antiguo llamado "Moñiga"; curioso nombre que fie reflejaba lo que era esta tasca con tiendecita de ultramarinos adosada, especie de "Corte Inglés" para pobres, y en donde hubo duras críticas para el actual Gobierno local y hacia su mayor representante, con la presencia de más de un comunista que tuvo que aguantar el chaparroncillo, volvimos a la feria de los vecinos, donde nuevamente fuimos atendidos perfectamente.
                    Por todo ello y porque es una evidente realidad, es justo reconocer que cuentan con un recinto ferial de maravillas, que saben cuidar lo suyo muy bien y hasta el último detalle, que no se conforman con cumplir, que lo pregonan con gustoso envanecimiento porque lo tienen muy claro... Pero entre tanta virtud reconocida, tan sólo un borrón que puede llevarnos a la cuenta de la vieja, en lugar de a la de la nueva, la de que son muy maireneros.


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