¡ QUÉ FALTITA NOS HACE!
Y el Niño de la cuna de Belén, que nació en Tierra Santa y donde pasó toda su vida, no se cansa de pedir PAZ, entre los hombres.
Y qué hacemos nosotros, mirar para otro lado.
Y qué hacen los Gobiernos de los países que no sufren la guerra, palabras, palabras, palabras y un montón de buenas intenciones, mientras la parca se frota las manos porque no le falta trabajo. Y los hay también gobiernos que la imitan, a la parca, sí, porque hacen negocios enormes construyendo armas de las matan, pero que disparan y esconde la mano
Y qué hacen las Asociaciones y Organismos que tienen a gala la Defensa de los Derechos,
pues casi lo mismo, buenas intenciones, muchas, muchas, y palabras, palabras y palabras...
Y el Niño, de la cuna de Belén, que nació en Tierra Santa y donde pasó toda su vida, no se cansa de pedir PAZ, entre los hombres. Pero el hombre está muy ocupado en otras cosas y cierra sus oídos, y seguimos mirando hacia otro lado... ¿Hasta cuándo?
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