sábado, 29 de julio de 2023

UN AÑO ANTES DE LAS BODAS DE ORO

 

Sábado, 4 de mayo de 2019. 


A 20 días de las BODAS DE ORO 

 

           RESUMEN DE UNAS BONITAS Y BIEN APROVECHADAS JORNADAS Y VUELTA A CASA,SIN NOVEDAD

 

                 La cena en el hotel Sol Meliá abundante y variada. Veníamos de comer y beber bien, de saciarnos, de atiborrarnos de exquisiteces y, he aquí que, sin darnos apenas cuenta, nos encontramos de nuevo dispuestos a continuar con la “faena” de darle trabajo a la dentadura y al apetecible “tragar”. ¿Quién se resiste a degustar unas pocas de variedades alimentarias entre cientos y cientos de ellas que te gritan o susurran, con mayor o menor insistencia, “cómeme” (aunque sea sin ganas) en manifiesto pecado de gula? Y así fue, ganó el dicho de “Llenar el ojo antes que la tripa”, y nos preparamos en aquel bufé, nunca desechable, unos abundantes platos de todo aquello que se nos metió por los ojos, fritos, pescados, verduritas, carnes, y que sé yo (por la ceguera manifiesta en que nos encontrábamos y, también, por no perder la cena contratada en la reserva del hotel) Una dieta total nos hubiera venido de maravilla. Pero así somos los “comilones pecadores” o, los “pecadores zampones”. 

 

                El hotel, de los primeros construidos en la Costa del Sol y remodelados hacía poco tiempo, contaba con “infinitas” habitaciones y grandes espacios para todo, recepción, aparcamientos, piscinas, salas de juego, comedores interiores y exteriores, salas recreativas, etc., etc. Todo ello, en aquellos momentos, nos sobraba. Solo queríamos una habitación donde descansar y recuperar las perdidas horas de sueño en tan largo día. 

 

https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhyPo8fYdu1NxlYnye_ExPjznhm7_3lXolxxuMKERvHnD3d-JBfh6-tKT2nTyKwsfrYYFMMLincdZav2bns80psJr00sCLym7Cd0gFR1dOXaUbRmZENY5yFYE4IU2nktmKuDs4fADpJq00/s400/Z+FOTOS+B.O+404.jpg 

 

                        El cansancio, el madrugón, el viaje pudieron más que la pesadez de estómago por lo digerido a lo largo del día y, por ellos, pudimos “descabezar” una buena dormida digna de ser registrada en el libro personal de record menores. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario