Sábado, día 28 de Octubre
LA TIERRA TEMBLÓ EN LA CERCANA ARGELIA
Como si de una mala digestión del Planeta Azul se tratara o como si sintiera escalofríos por el empeño de la humanidad en alterarlo en lugar de disfrutarlo, la Tierra periódicamente se sacude y avisa a los hombres de que es un astro vivo y en continua transformación.
Después de los terroríficos momentos padecidos por los habitantes de San Francisco y sus alrededores, ha sido un rincón del norte del continente africano, concretamente en Argelia, que ha sido sacudida por fuertes movimientos sísmicos, que además de cobrarse algunas victimas, arrojó a las calles como siempre ocurre en estos casos, a la gente con el temor metido en el cuerpo; no ya por el miedo a lo pasado solamente, sino por la venida del próximo que no se sabe cuando llegará, por las malditas réplicas, que en ocasiones son aún más duras.
Y si todo esto me ha llamado la atención es porque el mismo fue registrado también en Nador, población cercana, tan sólo a una docena de kilómetros, de Melilla, donde viven muchos de los nuestros y en donde en tiempos pasados vivimos experiencias de este tipo, que no se olvidan con facilidad, como aquellas que se repitieron durante varios días seguidos y que nos permitieron descubrir situaciones variadísimas y nuevas que podrían servir para llevar a cabo un tratado sobre la psique humana, sobre todo teniendo en cuenta las reacciones ante tales hechos.
Recuerdos lejanos nada agradables, que no me gustaría que se repitieran, porque estoy entre los que el temor me invade fuertemente en tales ocasiones.
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