Lunes, 25 de junio de 2018.
A 333 días de las BODAS DE ORO
ESPAÑA SE LA JUEGA
Marruecos, sin alardes de grandeza, puso al descubierto nuestras carencias y a punto estuvo de arrojarnos al bando de los mediocres, al de los equipos faltos de aspiraciones, de colocarnos en el pelotón de los más torpes.
Empiezan a aparecer los fantasmas del fracaso, del fiasco, del descalabro y, si Dios y el buen hacer de los peques Isco e Iniesta, no lo remedian, nos vemos haciendo, antes de tiempo, las maletas.
La suerte, para desgracia y fortuna de Portugal, a puntito de “irse” si en la última jugada del partido un desconocido iraní marca. Estos, nos regalaron con su empate con los lusos, la oportunidad de librarnos de Uruguay, qué si lo está haciendo bien, aunque no nos gusten las actitudes y comportamiento de uno de sus mejores jugadores, Luis Suárez. De todas maneras, nos toca pelearnos con los anfitriones, en su casa y arropados por miles y miles de seguidores dispuestos a quedarse sin gargantas para amilanar a los hispanos.
Qué divertido lo del “VAR”. Se acabaron los goles fantasmas, se fueron al garete los no goles, renacieron los goles anulados injustamente. Sólo tiene un inconveniente que, con él, unos ganan y otros pierden, no hay empate. Unos lo aplauden y otros lo condenan y maldicen.

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