INVENTAR A DIOS
A todas horas del día,
a
cualquiera de la noche,
el
hombre, cuando se aburre,
cuando
piensa en los más pobres,
cuando
sueña con sus muertos,
cuando
olvida los rencores,
cuando
truena Santa Bárbara,
cuando
la vida se rompe,
cuando
del suelo se eleva,
en
busca de gratos goces,
se
entretiene en inventar
un
Dios, con aromas de hombre.
Para
inventar a su Dios,
en
la soledad, se esconde,
y
armándose de osadía,
varios
caminos escoge,
unos
son del corazón,
otros,
de las mentes pobres.
Para inventar a su Dios,
chanclas
humildes se pone,
y
con ellas, en sus pies,
viejos
senderos recorre,
unos
van al infinito,
otros,
no se sabe dónde.
Para inventar a su Dios,
olvida
su humano nombre,
se
eleva a divino cielo,
quiere
buscar sumos dones,
unos
para darle gloria,
otros,
lo mejor del hombre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario