PLEGARIA INÚTIL
Agua, santa y bendita agua,
tú, que nos vienes del cielo,
olvídate de nosotros,
en otros tiempos, sedientos,
cierra tus grifos dorados,
aparca tu desenfreno,
que ya los daños celebran,
maldades de viejo record.
Agua, clara y bendita agua,
tesoro, grato sustento,
aléjate de nosotros,
búscate mejores tiempos,
para saciar nuestra sed,
para olvidar los lamentos,
que, como preces malditas,
brotan de nuestros adentros.
Hablemos de teatro: Vudú (3318) Blixen
Hace 1 mes
Siete años de sequía y siete de abundancia, le dijo José al faraon al interpetar su sueños, por lo tanto, la Naturaleza siempre a actuado igual, ella sigue su ciclo. Anaïs
ResponderEliminarDe todas maneras, Anais, la abundancia de lluvia en este último año está superando con creces lo programado y los daños producidos son importantes, sobre todo por estas tierras de secano.
ResponderEliminarAbrazos