POESÍAS LOCAS

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locura vigésimo prima 

LA VUELTA

        Vienen, Corredera abajo,

huestes de la romería,

llevan marcados en rostros 

huellas de festivo día,

en el que mudos pretextos

se hermanan con las bebidas,

y el traicionero alcohol,

señor de grandes porfías,

campó glorioso, a sus anchas, 

cerca de la nueva ermita.

        Vienen, Corredera abajo,

vencidos, a la deriva, 

las legiones de romeros

llenos de incruentas heridas,

heridas de polvo y tierra, 

de borracheras, heridas,

heridas de multitud,

de locas idas y venidas,

heridas de nuevos tiempos, 

de vanidades, heridas,

heridas que mutan usos,

costumbres de viejos días.

        Vienen, Corredera abajo,

despilfarrando alegría,

hordas de rotos visueños

vencidos por la fatiga.

Baco ha sido generoso

en esta singular huida, 

derramando a cantarada 

toda clase de bebidas,

mostos de los viejos tiempos,

licores de nuestros días,

causantes de mil quebrantos, 

avales de moderna gira.

        Vienen, Corredera abajo,

en dislocadas cuadrillas,

desordenado gentío,

sin estandarte, ni guía,

dejaron atrás sus sueños,

olvidaron despedida

de su Patrona alcoreña,

que silenciosa camina,

huyendo del loco hombre,

buscando su paz divina.