366 .- CONDENA (BENDITA): UN AÑO Y UN DÍA
Cumplida condena,
tañan las campanas
de mis albedríos,
vanidad cantada,
en versos sumisos
de luengas mañanas,
de tardes rendidas,
de noches calladas.
En un año y un día,
muchas cosas pasar,
alegres palomas,
palomas amargas,
felices suspiros,
suspiros de escarcha,
ardorosos céfiros,
céfiros que espantan,
radiantes encuentros,
encuentros que matan,
y un rico venero
de inéditas aguas.
En un año y un día,
la vida se apaga,
se nace, se muere,
se pierde, se gana,
se ocultan, se encuentran
sueños y palabras,
verdades, mentiras,
esencias extrañas,
virtudes y vicios,
locuras hermanas.
En un año y un día,
sudores y manchas,
vacíos y sombras,
crecen a sus anchas.
Esfuerzos dolientes,
ocupan el alma
de tedios podridos,
de rica esperanza,
y la autoestima,
cima alta, alcanza,
mientras los complejos,
con crueldad te abrazan.
En un año y un día,
lo pasado, es nada,
escrito recuerdo,
páginas usadas,
rincones y olvidos,
pasiones gastadas,
encendidas sombras,
luces apagadas,
recuentos inútiles
de vieja hojarasca,
otoñales cuentas
que el tiempo reclama.
Pequeños pesares,
anidan en mi alma,
nidales crecidos
en vieja espadaña,
de vivos dolores
que hieren y desganan,
amigos perdidos,
en horas no gratas,
ejemplares hombres,
guerras inhumanas,
en versos reunidos,
ya historias pasadas.
Cumplida condena,
deleite me embarga,
cumplido deber,
no es poca ganancia.
El Viso del Alcor, 1 de Mayo de 2023
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