Como podéis contemplar en el modesto catálogo que hoy colgamos, en el año 1970 celebramos nuestra tercera Exposición en la ciudad de La Coruña, de la que guardamos un sabor agridulce, como explicaremos algo más tarde.
De la segunda experiencia nuestra sólo dar algunos apuntes. Después de la buena acogida que tuvimos en Melilla, nos animamos a presentarla en la ciudad en que nos estrenamos como maestros, en Ronda. Fue en el año 1966 en el Hotel Victoria, y dentro de los actos del Homenaje al poeta Rilke.
Volviendo de nuevo a los recuerdos de Galicia, esta la llevamos a cabo en el año 1970, ya estábamos en El Viso del Alcor residiendo por aquellas fechas. La misma se montó para presentarla en la Sala de la Asociación de Artistas de La Coruña, durante los días 4 y 12 de Mayo; pero inmodestamente apuntamos que agradó tanto nuestra muestra, que los responsables de la Sala nos pidieron que la prorrogáramos algunos días más. Obtenidos los correspondientes permisos de la Delegación de Educación de Sevilla, aceptamos aquella petición. Estaba compuesta la misma por plumillas realizadas en distintos colores de tinta china, por trabajos en témpera y otros pintados al óleo, conformando la misma un total de 38 obras.
La totalidad de ellas se quedaron en La Coruña. Y fue en el viaje de vuelta, en el Mini que conducía, cuando subía la Cuesta de la Sal, con una ligera llovizna, el vehículo derrapó debido a un reguero de aceite que había en la carretera y me lanzó, no exagero, hacía un barranco algo inclinado de un centenar de metros. El patinazo me llevó unos metros deslizándome fuera de la carretera, menos mal que subía, no pudiendo marchar a gran velocidad y en un instante me encontraba en él. Fueron segundos en el que recordé muchas cosas de mi vida y cuando volví a la realidad, estaba el coche sostenido por los dos únicos pinos que existían en la ladera y a unos tres o cuatro metros del asfalto. No era mi día; aunque pienso en muchas ocasiones y soñé muchas veces, que aquella mañana volví a nacer.
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