RECUERDOS DE SEVILLA

   DETALLE ESCULTÓRICO DE LA PUERTA DE LA ASUNCIÓN DE LA CATEDRAL DE SEVILLA

                            Tres son las Puertas de la Catedral de Sevilla que dan a la Avenida de la Constitución: la Puerta del Bautismo, la de la Asunción y la de San Miguel.

                            La Puerta del Bautismo tiene en su tímpano la escena del Bautismo de Cristo y es la puerta de acceso a la parroquia barroca del Sagrario, que forma parte de un edificio independiente de la catedral; trazada por Pedro Sánchez Falconete en el último tercio del siglo XVII. La puerta está flanqueada por columnas corintias y en la parte más alta cuenta con notables esculturas. Junto a la Puerta de San Miguel, son consideradas como las más antiguas; correspondiendo su construcción hacia 1434. En su tímpano puede contemplarse la escena del Nacimiento de Cristo.

                            En el centro de ambas se encuentra la Puerta de la Asunción, que cuenta en su tímpano la escena de la subida a los cielos de la Virgen María. Es la más importante de las tres y de estilo neogótico y que fue realizada en las últimas décadas del siglo XIX, entre los años 1877 y 1898. Es también la puerta principal del templo, ubicada a los pies de la nave central. Sus dimensiones son grandes, y a los lados sobre arquivoltas, aparecen una cuarentena de esculturas a tamaño natural

                            La puerta fue iniciada por Fernando Rosales entre los años 1829 y 1831, Luego seguiría en su construcción Joaquín Fernández en 1883 y toda la estatuaria de esta portada es obra de Ricardo Bellver, ejecutada en piedra artificial y entre los años 1885 y 1899. Todas las figuras van sobre pedestales y bajo doseletes, al modo habitual del gótico tradicional

          Magnífico y paciente trabajo de ocho de las figuras que parecen en la puerta de la Asunción

                            Además del relieve y del Apostolado, figuran allí los Santos Pablo, Lucas, Marcos, Jerónimo, Ambrosio, Agustín, Domingo de Guzmán, Francisco de Asís, Pedro Nolasco, Buenaventura, José, Joaquín, Tomás de Aquino, Lorenzo, Esteban, Antonio Abad, Carlos Borromeo, Vicente, Clemente; las Santas Ana y Magdalena y varias más, difíciles de identificar, hasta la cuarentena.