NUESTROS RECUERDOS DE SEVILLA

                                                 LAS FUENTES DE LAS PALOMAS 

                            También llamadas por el nombre menos conocido de Glorieta de las Palomas, se encuentra en la Plaza de América, que antiguamente era conocido como Huerto Mariana, es el punto de concentración y lugar donde viven y sobrevuelas constantemente numerosas palomas que le dan el apodo de "Parque de las Palomas" al célebre parque sevillano de María Luisa´

                            Cerca del acceso al parque desde el paseo de las Delicias y también del Palacio Mudéjar que sirviera de sede del Museo de Costumbres y Tradiciones de Sevilla, sobreviven dos fuentes que se conocen como "de las palomas", pues en principio eran tres parejas las que existían, de ahí que hablemos de supervivencia y que no desaparecieron por arte de magia, sino como fruto de actos evidentemente vandálicos y que despiertan en nosotros pensamientos acerca del qué placer encontrarán los que actúan de esta manera a la hora de llevarlos a la práctica. Sobre todo, cuando los que más disfrutaban en estos lugares y en compañía de sus preferentes y permanentes moradores, las palomas, eran los niños, que jugaban a corretear tras ellas o que les daban de comer sin ningún temor, permitiendo amigablemente que se posaran sobre sus manos o con incluso sorpresa, al ver como lo hacían, a veces, sobre otras partes de sus pequeños cuerpos...

                            Algunos podían culpar estas actitudes a la falta de vigilancia de la zona, que llevo a la perdida de las cuatro restantes; aunque es más justo señalar a los que por múltiples razones, de las que los hacen esclavos, disfrutan con el hacer daño por el solo hecho de hacerlo. Añadiendo a estas pérdidas incluso la decapitación de una de las figuras supervivientes que se encontraban en su torno.

                            Pareciendo, volviendo al tema que nos trae, que allí no llegó la "gripe aviar" que acabó con la venta ambulante que dada domingo existía en la plaza de la Alfalfa, pues de ser así, el parque no sería lo que es. Las fuentes fueron realizadas y ubicadas en el año 1964 y estaban situadas cerca de las pequeñas glorietas de la Mesa Rural y del Reloj.

                            Nosotros, con nuestra trabajada plumilla, queremos formar parte del álbum familiar de muchos sevillanos gracias a las Fuentes de las Palomas, en la emblemática Plaza de América del Parque de María Luisa, que están volviendo a la vida gracias a una laboriosa y compleja restauración por parte de la empresa a la que le encargó esta tarea el Ayuntamiento sevillano. De tal manera que tal encargo no se lo hizo a cualquiera, sino a una empresa con amplia experiencia en la conservación y restauración de otros monumentos de la ciudad y que se encargó de ejecutar una réplica de una de las esculturas que realizó Juan Ramón Lafita en 1964 y que fue destrozada en el año 2017, llevando a cabo también in situ la restauración de otra de las piezas, realizada en 1993 por Emilio García Ortiz.