Entrega 1. Escrito 16
LA “GUASA” Y LA MALA UVA DEL SR. TEZANOS.
El
CIS actual, ¡Dios nos guarde de él! y su
gran jefe el señor Tezanos, ¡Dios nos libre de él y cuanto antes mejor! se han
empeñado, amparados en la guasa y la caradura, en hacer una nueva España y, de
paso, considerar a los españoles un rebaño de mansos corderitos con genética
“pesoísta” y ramalazos “comunistoides” que, con estoicismo, aceptan todas y
cuantas estadísticas lanza periódicamente, previstas, en su falso contenido
y provistas de una descarada parcialidad, no creíble ni por los “suyos”.
¡Vaya cara tiene el geta, o vaya geta tiene el cara! ¿Cómo se puede ser
tan mezquino, tan lame culo, tan… “tantán”, para falsear y moldear, a su gusto,
las opiniones de los encuestados, las insidiosas preguntas y, como colofón, los
manipulados resultados?
El
Sr. (o lo que sea) Tezanos es el clásico señor de otros tiempos ya
aparentemente superados, ¡Gracias a Dios y a su corte celestial! ¡Qué a gusto
se hubiera sentido en pasados tiempos! Operando a su antojo, manejando a
capricho las encuestas (o lo que sean), manipulando sin escrúpulos, sin pudor y
sin conciencia de menoscabos y deterioro de sus acólitos (cada vez “mermados” y
“más cortitos” en cuanto al número y seguimiento de seguidores)
Tezanos bien pudo ser un celebrado falso profeta, o un iluminado
Rasputín, a la española, o un iluso Quijote de mal gusto, peores formas e
inaguantable, o un clásico vendido al poder. Pero no llegó a tanto, se quedó en
un espantapájaros, en un mentiroso sin escrúpulos, en un payaso analfabeto de
las encuestas. Nos es de extrañar que pronto, a no mucho tardar, lo veamos
repartiendo catálogos de perniciosas encuestas, hechas a gusto de sus pagadores
(sean del bando que sean), de sus poderosos clientes y de cualquiera que lo
mantenga en su poltrona de intelectual. Eso sí, ganando una buena pasta gansa.
Señor Vichavila, podría darnos una fórmula para hacer desaparecer del mundo de la política a esta “rara avis”, porque dimitir, no va a dimitir, de ninguna de las maneras.
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