7 .- AÑORANZA TERCIA ( III )
"Un cuento para la mar de la playa de San Lorenzo"
El músico de altos sones,
afina amigo instrumento,
agudiza oído y mente
abriendo arcones etéreos
donde guarda siete notas
que componen su sustento.
El mar sonoro lo arrulla
con su monótono aliento,
robándole inspiración
y musa de gratos vuelos.
¡Cuidado músico amigo
con tus acordes de sueño,
que para cantar al mar
hay que ser buen marinero!
Las notas juegan y juegan
sobre pentagrama incierto,
sin acabar de asentarse
en hilos finos de encuentros.
La nacida partitura,
arrastrada por el viento
ya navega a la deriva
sobrada de tensos miedos,
sin atreverse a soñar,
sobre la mar, un concierto.
afina amigo instrumento,
agudiza oído y mente
abriendo arcones etéreos
donde guarda siete notas
que componen su sustento.
El mar sonoro lo arrulla
con su monótono aliento,
robándole inspiración
y musa de gratos vuelos.
¡Cuidado músico amigo
con tus acordes de sueño,
que para cantar al mar
hay que ser buen marinero!
Las notas juegan y juegan
sobre pentagrama incierto,
sin acabar de asentarse
en hilos finos de encuentros.
La nacida partitura,
arrastrada por el viento
ya navega a la deriva
sobrada de tensos miedos,
sin atreverse a soñar,
sobre la mar, un concierto.
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