CUENTOS NUEVOS DE NUEVOS ABUELOS

LA CARMELA, MEDIO MEIGA, Y SUS TRES RAPACIÑOS: GALA, ENZO Y BELTRÁN

(XXVI)  Los tres rapaciños consiguen del Rey el que vaya con ellos hacia su castillo, su querida Carmela; emprendiendo su marcha al mismo. Confesando el cuentacuentos que ha perdido el final de este, rogándonos que lo perdonemos por ello.

        Y antes de poner en práctica
esta nueva estratagema,
de los tres, el más pequeño
con media lengua le increpa,
yo me marcho a tu castillo
de los cuentos que nos cuentas
si se viene con nosotros
la brujita, que es muy buena.
        Aquel rey se ríe con ganas,
le revuelve su cabeza 
y asiente bien complacido
a súplica, que este hiciera,
ganando la voluntad
de aquella gente pequeña
y de la bruja Carmela,
que así de ellos sigue cerca.
 
         Sobre bonito alazán
cabalga el rey de estas tierras,

sigue Carmela sus pasos,

montando una linda yegua
y tres pollinos preciosos
montan la gente pequeña,
portando una mula torda
para el viaje, algunas prendas,
variadas y ricas viandas
y hasta juegos de madera
para ganar voluntad,
si ello necesario fuera,
de los suyos sobrinitos
cuando descanso tuvieran.

        Después de muchas jornadas

por caminos y veredas,
por vericuetos recónditos,
para que nadie los viera,
al cielo raso durmiendo
bajo millones de estrellas,
degustando las comidas
que Carmela les hiciera
y de jugar con el hombre
a juegos que él les enseña
y de escuchar bien felices
las historias y leyendas
que contaba a los tres niños
antes de que se durmieran,
con grande sorpresa de estos
al suyo palacio llegan,
en donde muchos sirvientes
con alegría les esperan.
 
         Queridísimos lectores,
por si algún día los tuviera,
con modestia os solicito
que disculpéis mi torpeza,
porque el final de este cuento
en triste día lo perdiera;
aunque ello solución tiene,
la que cada cual le diera.

                                             El Viso del Alcor, 25 de Junio de 2025