SÁBADO, DÍA 28 DE NOVIEMBRE
VANIDAD DE PADRE
Ante tanto elogio caí en la tentación infantil al decir: "Ese es el pequeño mío".
Y es que jugando a baloncesto le salió un partido muy completo a Alejandro, uno de mis mellis, haciéndolo además con los mayores del U. P. Viso; además ganando un partido que estuvo muy difícil y que si ganaron, con el gran esfuerzo que hicieron todos, se debió también en gran parte al apoyo del público, que se entusiasmó fácílmente con el juego desarrollado por los nuestros en este bello deporte de la canasta y que no cesó de animar a los jugadores locales , así como intimidar, que todo hay que decirlo, al dúo arbitral
La lástima es que Alejandro no tenga unos pocos centímetros más de estatura o que viva en un pequeño pueblo como el nuestro.
Con estas reflexiones no resulta difícil comprender que hoy titulara mi escrito con esa frase corta de "Vanidad de padre".
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