LUNES, DÍA 13 DE JUNIO
NI ÉL MISMO SE LO CREÍA
Que era el favorito para todos era evidente; incluso con las escapadas que había permitido y su aire un cierto reservón, que le había llevado a soportar algunas críticas, colocándole además en el puesto doce, con todos los favoritos por delante; él lo seguía siendo. Y la contra-reloj del Tour, en Luxemburgo, debía ganarla.
El pronostico se cumplió y de qué manera. Al final deba la impresión de que nadie se lo creía; sin embargo, era un hecho real, que no engañaba como tal a nadie. El miedo o respeto que le tenían se tornaría primero en sorpresa; luego, en más miedo y más respeto. Si al segundo, su compañero de equipo, Armand de las Cuevas, le aventajó en tres minutos justos, a los demás que les sacaría. ¡Qué cara la de Fgnon, al que superó, habiendo salido 3 minutos antes!
Eso sí, nuevamente hubo que padecer el "chauvinismo" de la Televisión Francesa, con un tratamiento especial de olvidarse de Indurain, y le dedicó tres momentos fugaces - en la salida, a media carrera y a la llegada, y que sería por ir con el francés antes citado, Fignon, corredor galo. Mientras que otros chuparon cámara durante toda la estapa; aun sin ser el lider Lino.
¡ Chapeau, Indurain !
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