ROMANCERO DE LOS ALCORES

10   .-   AHIJADA

                                        A mi ahijada CARMEN

        Promesa quiero cumplir,
antes de la madrugada.
Juego con versos y rimas,
con afectivas palabras
y antes de que cante el gallo,
daré por finalizada,
la amena y grata tarea,
de componer de la nada,
con entusiasmo de niño,
el poema de mi ahijada.

                

                                    

        La vida teje sin fin

incierta tela de araña,

a mi, pobre soñador,
me regaló dulce ahijada,
grano de áurea espiga,
aroma de fiel Giralda,
con sales de la Bahía,
nieve y sol de su Granada
y la savia del Alcor,
de sus padres, heredada.

        Amiga de sus amigas,

en ello nadie le iguala,
nada le parece suyo,
todo en sus manos se escapa.
Por sangre de López es
romántica y despistada;
simpática y charlatana,
por los genes de la “Chata”.

        Callejas de Santa Cruz,

de la Sevilla embrujada
y sabio Guadalquivir,
hermoso gran mar de Triana,
pregoneros de ocasión,
a los cuatro vientos lanzan,
que un cupido juguetón,
ha herido a mi ahijada
con la saeta de un joven,
de la “Karincia” austriaca.

        No amo ser sucedáneo

de padre de tanta talla,
yo sólo quiero cumplir
promesa firme y sagrada,
regada con agua bendita,
cuando fuiste bautizada,
y sin dejar de ser tío,
parentesco que me agrada,
me otorgaron padrinaje,
para lo que te haga falta.

                                            El Viso del Alcor, 23 de Noviembre de 2025