DOMINGO, DÍA 12 DE ENERO
EL FÚTBOL TELEVISIVO EN UN BAR ES OTRA HISTORIA
Si quieres ver cualquier deporte con verdadera tranquilidad lo ves en casa y santas pascuas. Pero si además de ver el partido de los domingos y quieres añadirle otros alicientes, estos te los sirven maravillosamente en un bar.
Sobre todo, si hay béticos, sevillistas y consecuentemente partidarios y "anti" del Real Madrid o del Barcelona.
Las voces se hacen habituales y no faltan los gestos y gritos que acompañan al éxito o a los errores de los participantes, según del lado que vengan, y que acompañan a los recuerdos de las santas madres de los trencillas de turno, por sus continuos errores, según el color del cristal a través de los que lo miran.
La objetividad desaparece por completo, y es difícil inhibirse del ambiente, mezclándose en este espacio los que son más o menos moderados, con los exaltados al máximo. Eso sí, sin que la sangre llegue al río jamás. Los "golpes" que uno escucha y las "ocurrencias" que uno , no sólo oye, sino que escucha son impresionantes, y seguro que darían material para escribir una antología del disparate.
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