27 .- PÍDEME OTRAS COSAS
No me pidas que te diga,
dónde
guardo yo mis sueños
que, por estas heredades,
anda mucho ladrón suelto,
que podrían despojarme
de estos caros alimentos
de mi alma soñadora,
a la que yo, mucho quiero.
No me pidas que te diga,
dónde oculto mis recuerdos,
ni me pidas que te diga,
dónde encuentro tantos versos,
que son cositas sagradas,
amantes de lo secreto,
y no quieren que se sepa
donde consumen su tiempo,
antes de ser dibujados
en los telares del tiempo.
No me pidas que te diga,
dónde busco yo mi tiempo,
pues ni yo mismo lo sé
y soy su probado dueño.
No me pidas que te diga,
dónde encuentro mis silencios,
aquellos que me enseñaron
a ser prudente y sincero,
a escuchar, con complacencia,
al amigo, al compañero,
para sorber, callandito,
las historias y los cuentos.
No me pidas que te cuente
mis más queridos secretos
que, cuando son conocidos,
aireados, descubiertos,
padecen horrenda muerte,
que no se merecen, ellos.
que, por estas heredades,
anda mucho ladrón suelto,
que podrían despojarme
de estos caros alimentos
de mi alma soñadora,
a la que yo, mucho quiero.
dónde oculto mis recuerdos,
ni me pidas que te diga,
dónde encuentro tantos versos,
que son cositas sagradas,
amantes de lo secreto,
y no quieren que se sepa
donde consumen su tiempo,
antes de ser dibujados
en los telares del tiempo.
dónde busco yo mi tiempo,
pues ni yo mismo lo sé
y soy su probado dueño.
dónde encuentro mis silencios,
aquellos que me enseñaron
a ser prudente y sincero,
a escuchar, con complacencia,
al amigo, al compañero,
para sorber, callandito,
las historias y los cuentos.
mis más queridos secretos
que, cuando son conocidos,
aireados, descubiertos,
padecen horrenda muerte,
que no se merecen, ellos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario