En tiempo de PANDEMIA

 Entrega 4. Escrito 16

EUROPA SE PORTÓ BIEN

      Europa se portó bien con nosotros, desde ahora, desde ya, veremos cómo nos portamos nosotros con Europa. Miles de millones de euros nos han tocado, como si fuera el premio gordo de la lotería. 140 mil millones, en un periodo de 3 años, recibirá España de la UE. La mitad aproximadamente a fondo perdido, a no devolver, de “baracarlofy”, como diría popularmente un caballero musulmán y, el resto, a devolver con intereses bajos.      

     ¡No está mal la cosa!

     El presidente Sánchez más contento que unas pascuas. Recibido por sus acólitos del gobierno, con paseíllo y aplausos (vulgarmente “peloteando” al “presi” para no perder el sillón) ¡Qué todo se sabe en esta especial casa del pueblo!

     Los sindicatos recibieron la noticia con elogios y satisfacción, aunque, como de costumbre, añadieron ciertos “peros”. Como el gobierno se descuide, parte de este montante millonario de euros, termina en sus manos o en sus bolsillos. Los empresarios, también satisfecho, aplaudieron el gesto de Europa con los españoles.

     Los europeos, sobre todo los del norte, no dieron el parné sin poner algunas condiciones que obligatoriamente se han de cumplir y si no se cumplieran, devolución al canto miserere. Y, de paso, perderíamos la poca fiabilidad que nos queda entre los europeos.

      Como español no me fío del buen uso de este “capitalazo”.  por parte de los gobernantes actuales. ¡Ojalá yerre en esta apreciación y me vea obligado a reconocer mi error y a pedir perdón, costumbre no habitual en los mandamases del hoy! No tardarán estos irresponsables gobernantes en considerarse milmillonarios, dispuestos a derrochar o malgastar los fondos recibidos de Europa para solucionar los problemas ocasionados por el dichoso coronavirus y otras importantes necesidades. ¡El tiempo dirá!

     Por último, no acabo de entender que después del detallazo de la UE con nosotros, haya personajillos dentro del gobierno que preferirían salir de Europa o romperla, como han roto otros países. No sabemos bien lo que tenemos “encima”; las espadas de Damocles se quedan en pañales en el oscuro porvenir.